CLG dialogó con Arístides Alvarez, presidente de la ONG "Si nos reímos, nos reímos todos", quien aseguró que los casos se multiplicaron y dio detalles de la película que realizaron para abordar la problemática
Por Sofía Dalonse
El bullying es una problemática que causa en el mundo al menos 200 muertes directas cada año. Unicef indicó que 7 de cada 10 niños y adolescentes son víctimas de acoso y 1 de cada 3 sufre acoso escolar. En este marco, la pandemia dio lugar a nuevas formas de bullying mediante la expansión de la virtualidad durante el aislamiento y, con el retorno a las aulas, el problema parece agravarse; según explicó Arístides Álvarez a CLG.
Álvarez es ex director de escuela y presidente de la ONG “Si nos reímos, nos reímos todxs”. En diálogo con CLG, mostró preocupación por la vuelta a la presencialidad: “Volvieron a suceder situaciones de acoso, maltrato, bullying. Algunos colegios reaccionan y otros no, es siempre lo mismo. Tiene que pasar algo grave para que se tome dimensión».
Las cifras son alarmantes. Según un reciente informe de la ONG Internacional Bullying Sin Fronteras, Argentina se encuentra entre las 15 naciones del mundo con mayores índices de acoso escolar.
En relación al concepto, Álvarez se refirió a términos como acoso, maltrato, discriminación y destacó que tiene que ser sostenido en el tiempo: «No es una broma de un día. Es mucho más serio, mucho más duro. Causa mucho más daño. Es tomar de punto a alguien durante meses, años», explicó y señaló que hubo un incremento de casos: «En los últimos días estamos teniendo muchas consultas de este tipo que plantean las mamás por situaciones que viven sus hijos en este retorno a las aulas».
Asimismo, reafirmó su postura y advirtió sobre la situación de Rosario respecto a esta problemática: «Estamos volviendo a repetir los errores que había antes de la pandemia. Al no haber presencialidad hubo cyberbullying y ahora en la vuelta de la presencialidad los casos se multiplicaron”, aseguró.
Por otra parte, sostuvo que el problema debe abordarse con una política de estado que trascienda el ejido municipal, provincial y nacional. Según manifestó, debe crearse una política de estado más allá de las gestiones de Gobierno y afirmó que eso no sucede. «Asume una nueva gestión y lo anterior queda inconcluso o parado, y en esa pérdida de tiempo, de reeditar todo, los perjudicados siguen siendo los chicos.»
Desde esta perspectiva, manifestó: «Me permito hablar desde el lugar de una ONG, ya que no estamos alineados partidariamente con ninguna gestión y estamos precisamente para llamarle la atención al Estado, esa debe ser la esencia de estas organizaciones».
Sin embargo, consideró que hay herramientas para abordarla pero no son suficientes al no enmarcarse dentro de esta política de Estado ausente. En este sentido, destacó los recursos de la «Ley Nacional por la Convivencia», que data del año 2013, cuya autora es Mara Brawer. «La iniciativa fija las bases para la promoción de la convivencia y el abordaje de la conflictividad social en las instituciones educativas y retoma principios como el respeto y la aceptación de las diferencias, la resolución pacífica de los conflictos, la apelación al diálogo y la contextualización de las situaciones de violencia«, remarcó.
Además, señaló que en Santa Fe existe una ley provincial que previene el acoso escolar. «Fue promulgada en 2018 después de un caso muy triste que fue un suicidio en la ciudad de Santa Fe, pero nunca se instrumentó a pesar de estar vigente».
En este contexto, consideró que «si las leyes están y los episodios siguen ocurriendo es porque no está alcanzando» y destacó la importancia de apostar a la prevención. «Lo mismo sucede con el grooming, que es el acoso de adultos a menores mediante las redes sociales, muchísimos casos potenciados por la virtualidad y el uso de internet. También hay una ley a la cual la provincia no adhirió y los hechos siguen incrementándose», señaló.
Según postuló, otra cuestión que toma relevancia en este panorama es el rol del adulto. «Es fundamental, hay que intervenir siempre, no hay que naturalizar. Es importante dialogar y hacerle entender al chico que no está bien.»
Para concluir, habló del lanzamiento de «3 de 10», el primer largometraje de ficción del país en abordar el acoso escolar, que se estrenará en diciembre de este año: «Una producción netamente rosarina, podemos decirlo con orgullo», resaltó Álvarez y describió el momento en que recibió un llamado del director Fernando Foulques, cineasta de la ciudad, para llevar a cabo este proyecto: «A principios de este año me llamó un día y me dijo vamos a hacer la peli. Hicimos algo maratónico: armamos el guión, hicimos pruebas y ensayos virtualmente y luego comenzamos a grabar en el complejo Gurruchaga». Según explicó, el nombre hace referencia a la estadística de Unicef a nivel mundial que coincide con el censo que se realizó en Argentina.