El titular de la UIA criticó el congelamiento de precios y manifestó su descontento por la aprobación de la Ley de Etiquetado Frontal
El presidente de la Unión Industrial Argentina (UIA) y de la Coordinadora de las Industrias de Productos Alimenticios (COPAL), Daniel Funes de Rioja, aseguro que estar “absolutamente en contra del control de precios” e indicó que “conspira contra la libertad de producción y la posibilidad de que haya más empresas y más empleo en la alimentación”.
Funes de Rioja expresó que “durante mucho tiempo hemos sugerido buscar acuerdos”, haciendo referencia al intento por lograr medidas de consenso, como fue el caso de Precios Cuidados. Al mismo tiempo señaló que se había trabajado en un cronograma para compensar el atraso que se había provocado con los precios máximos establecidos en el principio del Aislamientos Social Preventivo y Obligatorio (ASPO), pero “cuando estábamos en ese proceso de recuperación llega esta nueva resolución que trae un congelamiento».
Al mismo tiempo remarcó su vocación de seguir buscando entablar conversaciones que lleven a la concertación para alcanzar un acuerdo: “Soy dialoguista y entiendo que hay que buscar caminos de solución. Esos caminos no se arreglan a los gritos sino tratando de convencer”. Aun así señaló que mantendrán su postura de marcar que “este no es el camino”, ya que afirmó se trata de “una medida anti empresa”.
En relación a posibles faltantes de alimentos en las góndolas indicó que «hay diversos motivos por los que hay riesgo, no solo causas nacionales, sino también internacionales. Si no llegan containers, pueden faltar insumos, pero no tiene que ver con este tipo de medidas. Aspiro a que se encuentre un sendero común que lo evite porque por un lado, las más afectadas van a ser las Pymes y por el otro esto no va a resolver el problema de la inflación”.
Con respecto a la reciente sanción de la Ley de Etiquetado Frontal de Alimentos fue contundente y aseguró que “la demonización del alimento no es el camino”, además advirtió que en la práctica se van a presentar “trastornos”, como por ejemplo que “no se van a poder donar alimentos o que el Estado no va a poder comprar alimentos procesados”.
Funes de Rioja añadió que la nueva ley “va a perjudicar muy fuertemente en el Mercosur”, ya que se pensó en una norma de orden local, en lugar de una general para el bloque. En ese sentido aseguró sentirse “profundamente afectado porque no solamente votó el proyecto el Frente de Todos sino que votaron 200 diputados de todos los partidos. Lamentablemente lo considero un error”.