El mandatario ecuatoriano anticipó que no tiene intenciones de modificar la política que fija los precios, pero sí es partidario de focalizar subsidios para sectores pobres y estratégicos como los indígenas y el transporte.
El presidente de Ecuador, Guillermo Lasso, comenzó este lunes una rueda de diálogo con organizaciones indígenas del país, entre ellas la mayoritaria y opositora Conaie, que rechaza un alza del precio de los combustibles.
«Iniciamos el diálogo con la Conaie y con algunas otras organizaciones sociales del Ecuador como ya lo hemos hecho» con los transportistas, dijo el mandatario de derecha ante la cúpula de la Confederación de Nacionalidades Indígenas del Ecuador (Conaie) y dirigentes de otros colectivos de base de los nativos.
El encuentro constituye el primero entre Lasso, quien asumió el gobierno en mayo pasado, y Leonidas Iza, titular de la Conaie, organización que participó en revueltas sociales que derivaron en el derrocamiento de tres gobernantes entre 1997 y 2005.
Iza llegó al Palacio de Carondelet, sede del gobierno, encabezando una marcha pacífica de unos 300 indígenas, campesinos, trabajadores y estudiantes que recorrió unos tres kilómetros hasta el centro histórico de la capital.
La caminata partió del parque de El Arbolito, al norte de la casa presidencial, donde los aborígenes acostumbran a concentrarse para sus protestas en la capital Quito.
Allí, Iza planteó derogar decretos expedidos por el exgobernante Lenín Moreno (2017-2021) que disponen el reajuste mensual de los precios de los combustibles de acuerdo a los del petróleo en el mercado internacional.
Eso «incrementa los precios de todos los productos de primera necesidad», manifestó el dirigente, informó la agencia de noticias AFP.
Ecuador es de los países con precios de derivados del petróleo más baratos de Latinoamérica. El galón americano de gasolina corriente trepó de 1,48 a 2,39 dólares hasta septiembre, con un aumento de 61% en casi tres años.
Lasso anticipó que no tiene intenciones de modificar la política que fija los precios de los combustibles, pero sí es partidario de focalizar subsidios para sectores pobres y estratégicos como los indígenas y el transporte.
Los indígenas lideraron en 2019 violentas protestas contra la eliminación de esos subsidios, atado a compromisos con el Fondo Monetario Internacional (FMI) para recibir préstamos para la dolarizada economía ecuatoriana en crisis, que dejaron 11 muertos.
Las fuertes protestas obligaron a Moreno a dar marcha atrás de inmediato, aunque después decretó la revisión de precios según como se muevan los del crudo, que están al alza.
La Conaie rechaza además la minería, que se concentra en áreas indígenas, y reclama la fijación de precios justos para los productos del campo y la reestructuración de las deudas bancarias de unos 4 millones de ecuatorianos.
Los indígenas representan un 7,4% de la población del país, según el último censo de 2010, mientras que el dirigente nativo y excandidato presidencial Yaku Pérez sostiene que llegan a un 25% de los 17,7 millones de habitantes.