Desde el sector señalan que "la situación obligó a la Argentina a volver a importar gas como no sucedía desde 2018, porque la producción local apenas crece para abastecer la demanda"
La producción argentina de gas se mantiene por debajo de 2019, lo que obliga al gobierno a un mayor gasto para financiar las importaciones, sin que todavía tenga impacto pleno el Plan Gas lanzado para aumentarla, según especialistas en energía.
El economista Julián Rojo, del Instituto Argentino de Energía General Mosconi (IAE), explicó que la producción de gas «venía cayendo desde mediados de 2019 de manera tendencial, y la pandemia aceleró la caída».
«Hubo 16 meses de reducción interanual de la producción e YPF es la compañía que más redujo la extracción del fluido, mientras solo dos empresas producen más que hace dos años», agregó.
Según Rojo, la situación obligó a la Argentina a volver a importar gas como no sucedía desde 2018, porque la producción local apenas crece para abastecer la demanda.
El Gobierno puso en marcha un plan de estímulo al sector, que rige desde mayo último, pero las empresas todavía están extrayendo menos gas que en 2018 y 2019.
No obstante, Rojo destacó que «las cifras son mejores que las de 2017, cuando se estaba saliendo del congelamiento tarifario».
La producción de gas de julio fue de 130,7 millones de metros cúbicos (m3) diarios, un 9,4% menos que en igual mes del 2019, cuando las empresas obtuvieron 144,4 millones de m3, un récord que no se alcanzaba desde 2006.
«La producción venía cayendo desde mediados de 2019 de manera tendencial y la pandemia aceleró la caída. Hubo 16 meses de reducción interanual de la producción», explicó Rojo.
Precisó que esa caída «se cortó en junio. La producción bajó más que la demanda en pandemia. Como consecuencia, aumentaron las importaciones de gas de Bolivia y GNL que, en los últimos 12 meses, subieron un 25%».
El país necesitó comprar otros 50 millones de m3 diarios adicionales en los meses fríos.
Vaca Muerta.
En Vaca Muerta, la producción de petróleo alcanza niveles récords, pero el sector del gas no reaccionó de la misma forma que a estímulos oficiales anteriores.
Según el informe del IAE, salvo Pampa Energía y Pluspetrol, que están con una producción superior a la de 2019, el resto de las empresas trabajan con volúmenes inferiores a los de hace dos años.
YPF bajó de 43,7 millones de m3 en julio de 2019 a 35,4 millones este año, y también redujeron las extracción Total Austral, Tecpetrol y Pan American Energy (PAE).
«La producción de YPF fue la que más se redujo durante la pandemia, con una contracción del 16% en los últimos doce meses, y explicó el 66% de la reducción en la producción total», indicó Rojo.
Según el ex vicepresidente de Administración y Finanzas en YPF Nicolás Arceo, la producción de gas venía repuntando entre 2016 y 2019, pero la pandemia 2020 la perjudicó.
En julio último mejoró 3% frente al 2020, pero aún está por debajo de 2019. En cambio, subió 4,5% respecto de junio último.
Arceo señaló que la pandemia «afectó claramente la recuperación que venía desde 2014, con una adecuación de la oferta a los menores niveles de demanda. Esto se da en el contexto del inicio de la producción no convencional en la Argentina».
Cuánto cuesta importar gas.
El país paga alrededor de 4 dólares por millón de BTU, la unidad de medida del sector en gas, de producción nacional, mientras que importarlo le cuesta USD 8, con la consecuente afectación de divisas y aumento del gasto público.
Actualmente aumenta el consumo del gas importado, y con mayores niveles de subsidios, este año, las subvenciones a la energía ya superan los US$ 6.000 millones.
Fuentes de la secretaría de Energía afirman estar satisfechos con el nivel de producción nacional y que si el país tuviera más gas, no tendría cómo sacarlo de Neuquén, ya que faltan conexiones, como gasoductos de transporte.