CLG dialogó con Franco Sguassero, director de Tijeras Solidarias Rosario, sobre el trabajo que realizan desde la organización
Hace ya varios años, peluqueros, estilistas y profesionales del cuidado del cabello de todo el país se unieron para llevar sus servicios a los sectores más desprotegidos de la sociedad. El objetivo principal de esta iniciativa no es solo cortar el pelo a quienes necesitan, si no también generar espacios para compartir y conectar. CLG dialogó con Franco Sguassero, director de Tijeras Solidarias Rosario, sobre su trabajo.
En primera instancia, contó cómo empezó esta movida: «Surgió por iniciativa de una colega de Córdoba, Viviana». «Ella estuvo en España y trajo la idea a través de peluqueros en España que iban a cortar a el cabello a los campamentos de refugiados. Vino y comenzó a armar una red para hacerlo con niños y niñas en zonas vulnerables», recordó.
Actualmente, hay profesionales involucrados de las provincias de Jujuy, Chaco, Misiones, Corrientes, Formosa, Catamarca, La Rioja, Santa Fe, Tucumán, Santiago del Estero, Salta, Buenos Aires, Córdoba, San Juan, Río Negro y de localidades como Rosario, Peguajo, Rafaela, Tartagal y Mar del Plata, explica en la página oficial.
Sobre la tarea en sí, Franco señaló: «El corte de cabello, en este caso, es una excusa». «La idea es dedicarle un momento a los niños, preguntarles su nombre, cómo les va en la escuela. Es un encuentro hermoso que se produce en cada una de las jornadas», destacó. Y agregó: «Cortarles el cabello tiene que ver también con la dedicación y ayuda a elevar el autoestima».
El director de Tijeras Solidarias Rosario reveló que el grupo cuenta con una «mesa chica de ocho profesionales». Es este núcleo el que va «contactando gente para determinar los lugares a los que ir». «Siempre hemos encontrado espacios para ir y trabajar», remarcó.
«Lo que intentamos, según la zona, es que los peluqueros de ahí sean los que nos abran las puertas al barrio. Generalmente, vamos unos 15 días antes con un integrante de mesa chica y un peluquero del barrio para contactarnos con los referentes barriales. Ahí coordinamos cómo va a ser la jornada en líneas generales», comentó. Entonces, aclaró: «En todo este tiempo ya tenemos establecido un procedimiento sistematizado por cuestiones de seguridad y orden».
Sguassero reveló que «por jornadas son entre 25 y 35» peluqueros y estilistas que participan, aunque en el grupo hay alrededor de 70 en total. «Mucho depende de la capacidad del lugar en el que vayamos a trabajar», señaló.
«La idea es que sea el corte, la sonrisa y algo más», manifestó sobre los objetivos de cada jornada. De esta manera, se han encargado de llevar actividades paralelas en cada encuentro: «Hemos llevado payasos, maquilladoras, odontólogas para informar sobre cuidado bucal».
Además, también se inscribieron en el Banco de Alimentos Rosario. «Fuimos algunas veces a buscar alimentos, los fraccionábamos y nos asegurábamos que tanto los chicos como las familias coman algo ahí. Además, les dábamos una bolsa con distintos alimentos y elementos de higiene para que se lleven», destacó. Así reciben también donaciones de quienes deseen para entregar cada vez que van a los barrios, para más información pueden contactarse a la página de Facebook Tijeras Solidarias Rosario.
En este marco de pandemia, el grupo ha tenido que suspender las actividades en todo el país. «Todos estamos ávidos de encontrarnos, porque esto se ha convertido en una gran familia. Pero por cuestiones sanitarias todavía no nos animamos», aseguró. Pero recalcó: «No es falta de voluntad, queremos hacerlo con las certezas necesarias. Las ganas son infinitas, pero también el temor existe», cerró, deseando poder hacerlo pronto.