La pandemia, el crecimiento entre los jóvenes y la invitación a una nueva revolución que puede cambiar la economía
Por Marcelo Cavazzoli*
Hace algunos años había que ser un experto para comprar criptomonedas y hasta hoy varias aplicaciones requieren de cierto conocimiento técnico para poder operar dentro del mundo de la blockchain. Esto trae mucha incertidumbre en un usuario que aún no se anima a tener todo su dinero digitalizado.
Sin embargo, es interesante observar el porcentaje de adopción que han tenido en este último tiempo de pandemia, donde podemos observar la búsqueda constante de nuevas maneras de relacionarse con su dinero.
Este crecimiento exponencial puede verse en los jóvenes de entre 18 y 29 años, quienes no se sienten representados por el ecosistema financiero tradicional, uno que, en ocasiones, impone barreras de entrada desde lo operativo hasta lo digital, dado que no han logrado una adopción amigable para el contexto actual.
La revolución crypto es atractiva para cualquier joven porque les da libertad, independencia financiera y la posibilidad de manejar su cartera de monedas digitales para generar ingresos pasivos semanales, o anuales.
Esto último permite a cualquier persona convertirse en un pequeño inversor sin importar su origen, edad, ni profesión, porque esta revolución tiene miles de visores y todos estamos invitados a unirnos a ella.
Un dato interesante es que hasta fines de 2020 los usuarios que más monedas estables compraban (aquellas atadas al valor del dólar como el caso de «USDT»), estaban en la franja de los 30-40 años. Se trata de usuarios experimentados que vienen del mundo de las finanzas tradicionales y encuentran en las criptomonedas un mercado muy atractivo.
Sin embargo, desde comienzos de 2021 se pudo notar un boom de usuarios de entre 18 y 25 años, que ya vienen con una mentalidad enfocada en conocer el mundo «crypto» y hoy, se puede decir que son los máximos poseedores de monedas digitales estables, como la ya mencionada «USDT», en varias apps del mercado.
Así como el consumo del sistema de medios de comunicación tradicional fue cambiado por Twitch, Youtube y ahora Tik Tok, el cambio del sistema financiero tradicional es inminente.
Es importante educar sobre la lógica del nuevo mercado emergente con estrategias virales en las pantallas que más consumen los jóvenes en la actualidad.
Necesitamos hablar el mismo lenguaje monetario sin importar la distancia o región, y no hablo de tener una sola moneda, sino de un sistema monetario global que nos permita estar unidos.
Las empresas crypto deben entender que el modelo tradicional unidireccional de comunicación no logra funcionar en las nuevas mentes tenedoras de la economía digital.
Es necesario adoptar un estilo mucho más horizontal, en donde los usuarios y las marcas generen conversaciones que aporten valor al ecosistema, aprendan en conjunto y creen nuevos productos financieros.
En este sentido, las comunidades que se logran contemplar en Telegram, los podcasts y las salas de chats de voz son espacios muy interesantes en los cuales hay interacción real entre los jóvenes y las marcas, un concepto muy utilizado pero que no lo he visto implementado de manera tan fuerte como en el mundo crypto.
La nueva economía digital es entretenida, dado que está relacionada con el arte, el gaming (videojuegos), la música, entre tantas otras verticales donde con tan sólo invirtiendo una parte de tus ganancias en ellas (comprando la cripto dedicada a ese segmento), te convertís en un impulsor de la innovación del proyecto.
Con un pequeño toque en un smartphone, en cualquier parte del mundo, la gente podrá obtener un fragmento del futuro.
Todavía menos del 2% de la población mundial usa criptomonedas y los jóvenes son quienes más rápido las están adoptando.
Ellos son el futuro y por eso el desafío se encuentra en brindar accesibilidad, convirtiendo el proceso en una experiencia divertida, y usabilidad, permitiendo el uso real en la infraestructura actual, como las inminentes tarjetas de crédito que te permiten operar con pesos y/o cryptos.
Por primera vez en la historia todos estamos invitados a formar parte de una revolución. Esta vez el futuro está tokenizado y cuenta con millones de personas como socios. Esta vez, la revolución será más rápida y más grande. Esta vez, el futuro está abierto a todos.
(*) – Marcelo Cavazzoli es CEO & Founder de Lemon Cash.