El gobierno catalán basa su petición en el documento del Ministerio de Salud que establece que una incidencia semanal de más de 125 casos es un riesgo "muy alto"
El Gobierno catalán solicitó hoy al Tribunal Superior de Justicia de Cataluña (TSJC) restablecer el toque de queda nocturno para luchar contra la pandemia de coronavirus en Barcelona y decenas de municipios, un día después de que la justicia rechazara su petición para mantenerlo vigente en gran parte de esta región española.
El Gobierno basa su petición en el documento del Ministerio de Salud que establece que una incidencia semanal de más de 125 casos es un riesgo «muy alto», precisó la agencia de noticias AFP.
Fuentes del TSJC informaron que la deliberación sobre la petición se llevará a cabo a partir del próximo lunes, por lo que la movilidad nocturna estará permitida hasta, como mínimo, la noche del domingo al lunes en toda Cataluña, excepto en los municipios en que ya está vigente.
Tras la negativa del TSJC, que autorizó mantener la limitación de movimiento entre la 1 y las 6 de la mañana en solo 19 de los 148 municipios solicitados, el Ejecutivo regional formuló una nueva petición para lograr que la medida rija, al menos, en sus centros más poblados.
El Gobierno catalán solicita ahora recuperar el toque de queda en los municipios de más de 20.000 habitantes con una incidencia acumulada a partir de los 125 casos por 100.000 habitantes en siete días, reduciendo a la mitad el umbral ya autorizado por el Tribunal para los de más de 5.000 habitantes.
Esto permitiría que el toque de queda se aplicara en 62 localidades, entre ellas Barcelona y los grandes centros urbanos de esta dinámica región de casi 7,8 millones de habitantes, así como en puntos de gran afluencia turística como las costeras Lloret de Mar, Salou o Cambrils.
«La medida propuesta es necesaria y se considera proporcionada con el objetivo de control de la quinta ola pandémica», argumentó en un comunicado el Gobierno catalán, en la línea del malestar mostrado la víspera.
Alarmada por una explosión de contagios, especialmente entre los jóvenes, todavía sin vacunar, Cataluña recuperó el toque de queda para gran parte de su territorio el 17 de julio, pero cifras epidemiológicas ahora a la baja, empujaron al Tribunal a consideró que la última solicitud de prórroga obedecía más a motivos de orden público que sanitarios.
En pleno verano boreal y con los bares obligados a cerrar a las 3 de la mañana, muchas localidades turísticas no consiguen limitar los «botellones», cuando grupos, generalmente de jóvenes, se reúnen a beber en espacios públicos.
Con una incidencia acumulada de 317,14 casos por 100.000 habitantes a 14 días – que es el parámetro de medición nacional-, Cataluña se ubica por debajo de la media española (360,56, según los datos del jueves del ministerio de Salud), aunque continúa con una tasa de ocupación de camas de UCI por Covid-19 (41,49%) que dobla la media nacional.