El equipo argentino derrotó a Gran Bretaña por 17 a 12 y se adjudicó el tercer lugar del podio
La Selección argentina de rugby seven, Los Pumas, fue la artífice esta madrugada de la primera medalla de la delegación albiceleste en los Juegos Olímpicos de Tokio 2020, al ganar el bronce gracias a la victoria ante Gran Bretaña por 17-12.
El partido por la medalla de bronce arrancó complicado, tras sufrir un rápido try británico y acumular un par de infracciones que lo hicieron jugar casi todo el tiempo en su propio campo.
El ataque argentino no tenía la claridad que había mostrado en los anteriores juegos, lo que beneficiaba a Gran Bretaña, que había superado en un partido increíble a Estados Unidos en cuartos de final (remontó un 24-0) y luego perdió con la potencia Nueva Zelanda.
En ese contexto, el try de Lautaro Bazán Vélez, tras una rápida salida de scrum por el lado ciego, fue una bocanada de aire fresco y le permitió reencontrarse con su mejor versión.
De hecho, justo antes del entretiempo, Marcos Moneta perforó la defensa británica y dio vuelta el resultado con su sexto try en el torneo.
En el segundo tiempo, Los Pumas empezaron más concentrados y con mejor manejo de la ovalada, pero tras perder la pelota en ataque, Gran Bretaña encontró su segundo try con conversión incluida y puso el tablero 12-12, con 4 minutos por jugar.
Pero la reacción de los dirigidos por Santiago Gómez Cora fue de la mejor manera con una corrida larga por izquierda de Ignacio Mendy.
Tras una defensa bárbara en la última pelota, se desató el festejo de Los Pumas, que hicieron un gran torneo con un épico partido ante Sudáfrica en cuartos de final incluido, para mejorar el quinto puesto de Río 2016.
«Me siento un bendecido. Poder cumplir sueños no es fácil, hacer lo que a uno le gusta tampoco, y hacer las dos cosas juntas mucho menos. Hace tres días que no duermo, no es fácil estar en este lugar, estos chicos estuvieron un año encerrados, se subieron al auto y se pagaron un hotel, aprendieron a cocinarse, es muy emocionante», explicó Gómez Cora, uno de los máximos exponentes de esta modalidad, ahora como entrenador.
El rugby seven albiceleste tuvo que aprender a levantarse a lo largo de los últimos años: en 2009 perdió ante Gales la final del Mundial de la categoría por 19 a 12; también cayó en el partido decisivo de los Panamericanos en 2011 y 2015; y en Río 2016 fue derrotado muy ajustadamente por Gran Bretaña.
Luego llegó la medalla dorada en los Juegos de la Juventud de Buenos Aires 2018 -con Moneta en el plantel- y esa misma presea en los Panamericanos de Lima 2019, y ahora el bronce olímpico.
La alegría por el bronce obtenido dejó atrás la pequeña frustración que había recibido en el arranque del día en Tokio, final del martes en la Argentina, donde Los Pumas batallaron contra Fiji, uno de los mejores equipos del mundo y que se quedó luego con la dorada.
El equipo argentino se impuso en el primer tiempo por 14 a 12, pero en el complemento la potencia de los fijianos, especialistas en esta categoría, dejó sin resto al conjunto argentino.
Pero la historia cerró de la mejor manera para Los Pumas, que se convirtieron en los primeros deportistas argentinos en colgarse una medalla en Tokio 2020, en el quinto día de competencia oficial.