Un total de 74 bomberos respaldados por cinco helicópteros y cinco aviones hidrantes trabajaban para controlar el fuego
Un incendio forestal que comenzó este martes al pie del monte Pentélico, a unos 30 kilómetros de Atenas, amenazaba varias viviendas de la capital de Grecia, según indicaron los bomberos y autoridades locales.
Un total de 74 bomberos respaldados por cinco helicópteros y cinco aviones hidrantes trabajaban para controlar el fuego, avivado por la velocidad del viento que alcanzaba los 38 km/h y complicaba las operaciones.
El fuego se originó en una ladera del Pentélico, uno de los tres montes que rodean la cuenca de la capital, junto al Himeto y al Parnés, y que a principios de esta tarde rodeaban casas, según imágenes de televisión.
Una gran parte del monte quedó arrasado por otros incendios en 1995 y 1998, lo que allanó el camino a la construcción ilegal de viviendas, un fenómeno recurrente en Grecia, indicó la agencia de noticias AFP. Skai Yannis Kalafatelis, el alcalde de Dionisos, una de las localidades afectadas por el siniestro, afirmó que «el fuego es incontrolable».
El incendio afecta precisamente a las localidades de Stamata, Rodopoli y Dionisos, al norte de Atenas, lo que derivó en una interrupción de varios tramos de la carretera local.
«El fuego evoluciona. Se originó en Stamata y se propagó hacia Rodopoli. Seguramente hay daños. Enviamos importantes fuerzas para luchar contra las llamas», aseguró Yorgos Patulis, el prefecto de la región de Ática.
El jefe comunal advirtió que quienes se encuentran en Stamata, Rodopoli, Ekali, Drosia y Dionisos «cierren las chimeneas, las ventanas y las puertas para evitar que entren chispas». Aunque las autoridades no ordenaron por el momento evacuar, advirtieron mediante mensajes de alerta en celulares a los habitantes que se prepararan «a seguir instrucciones», aunque algunos de ellos ya abandonaron sus hogares, según medios locales.
Vassilis Vathrakoyannis, uno de los bomberos que combate las llamas, dijo que «nadie corre peligro». Los bosques griegos son víctimas cada año de incendios, avivados por fuertes vientos, especialmente durante el verano.
En julio de 2018, 102 personas murieron en la ciudad costera de Mati, cerca de Atenas, el peor balance provocado por un incendio en este país mediterráneo.