Por el momento la fiscal no tomó temperamento hacía el policía, ya que de acuerdo a las primeras actuaciones se trató de una legítima defensa
Un policía federal mató de un tiro a un delincuente e hirió de gravedad a otro cuando fue hasta la localidad bonaerense de Castelar a buscar una compra que había realizado por redes sociales y dos personas lo amenazaron y obligaron a subir a un vehículo, en el que lo llevaron cautivo por varias cuadras junto a un tercer cómplice, informaron fuentes policiales y judiciales.
El hecho comenzó ayer en la calle Hidalgo al 1800, esquina Navarro, en la mencionada localidad del partido de Morón, adonde el oficial de la Policía Federal Argentina (PFA) llegó a bordo de un remís, vestido de civil, para buscar una placa de video que había comprado por internet por 3.080 dólares.
Según dijeron las fuentes a Télam, el efectivo, perteneciente a la División Pericias Informáticas y Electrónicas, arribó al lugar en un remis conducido por otro policía, en este caso bonaerense, a quien le dijo que lo esperara, ya que buscaba algo y regresaba.
En ese momento, se detuvo en esa esquina una camioneta Renault Duster, desde cuyo interior descendieron tres hombres armados que redujeron a los policías y dos se llevaron cautivo al de la PFA en Fiat Palio del remisero, que también estaba de civil y fue obligado a descender del auto.
Al tomar conocimiento, personal de la comisaría 7ma. de Morón comenzó la búsqueda del Palio, que finalmente fue hallado chocado contra un árbol en la intersección de Zapiola y Curuchet, a unos 500 metros de donde se inició el episodio. Los efectivos liberaron al integrante de la PFA que estaba en el asiento trasero del auto en estado de shock, dijeron las fuentes.
En tanto en el asiento del conductor fue hallado gravemente herido de un tiro la parte posterior de la oreja derecha uno de los sospechosos y su cómplice con un balazo en la cabeza sentado atrás junto al policía, detallaron los informantes.
La principal pista de los pesquisas es que el policía extrajo su arma cuando era llevado en el auto y disparó contra los captores, lo que derivó en que el Palio quedara fuera de control y chocara contra el árbol. Tras ser rescatado del rodado, el efectivo fue asistido por una psicóloga y derivado al hospital Churruca, indicaron las fuentes.
En tanto los sospechosos, identificados como Andrés Santillán (49) y Maximiliano Gómez (28), fueron trasladados al Hospital de Haedo, donde el primero murió. Sobre el tercer delincuente que había arribado al lugar en la camioneta Duster, los voceros dijeron que no fue aún localizado.
La fiscal Adriana Suárez Corripio, titular de la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) 8 de Morón, ordenó que las pericias estén a cargo de Gendarmería Nacional por haber efectivos policiales involucrados.
En el interior del Palio los pesquisas hallaron una pistola Beretta calibre 9 milímetros sin numeración, otra pistola Bersa del mismo calibre con numeración suprimida y una mochila con tres cargadores.
En tanto, al policía federal se le incautó su pistola reglamentaria Taurus 9 milímetros con 13 proyectiles, que al igual que las otras será sometida a pericias. La fiscal aguarda los resultados preliminares de los estudios criminalísticos para establecer la cantidad de disparos que se realizaron en el auto y si todos fueron efectuados por el policía. Según pudo establecer, ambos delincuentes tenían varios antecedentes por distintos delitos.
La causa quedó caratulada como «robo agravado por el uso de arma de fuego y privación ilegítima de la libertad» y por el momento la fiscal no tomó temperamento hacía el policía, ya que de acuerdo a las primeras actuaciones se trató de una legítima defensa.