Con los ministros de Educación de todo el país buscan fijar un mínimo de 70% de contenidos aprobados para promocionar de grado o año
El ministro de Educación, Nicolás Trotta, encabezará esta mañana una nueva reunión del Consejo Federal de Educación, en la que se evaluará con los ministros de todo el país la propuesta de fijar un piso mínimo de 70% de contenidos aprobados para promocionar de grado o año, mientras que aquellos alumnos y alumnas que necesiten apoyo tendrán dictado de clases en febrero del 2022.
Según indicaron fuentes de la cartera educativa nacional, el proyecto será presentado en la reunión del Consejo Federal de Educación, convocada para las 11.
El eje central de la propuesta es incrementar los tiempos de enseñanza para fortalecer la calidad de los aprendizajes desde agosto hasta diciembre y en febrero del 2022 para estudiantes que necesiten más apoyo.
Además, el proyecto promueve que las ministras y ministros alcancen un acuerdo que considere como criterio para la promoción de un año a otro tener aprobados al menos el 70% de los contenidos que fueron priorizados para este ciclo escolar.
En este sentido, se busca «fortalecer la enseñanza en el primer ciclo de la primaria (de primero a tercer grado)» para lo cual «la promoción de tercero a cuarto grado de la primaria se dará cuando las y los chicos hayan adquirido las competencias de lectura y escritura básicas», indicó el Ministerio en un comunicado.
El documento propone, además, para estudiantes que hayan tenido trayectorias intermitentes o de baja intensidad y que necesitan más tiempo y más acompañamiento para apropiarse de los aprendizajes requeridos, instancias específicas de intensificación de la enseñanza.
En este aspecto se incorpora «un período especial de dictado de clases y de trabajo pedagógico en febrero 2022 con los estudiantes que terminan sala de 5 en el nivel inicial, sexto o séptimo grado de la primaria; y quinto, sexto o séptimo año de la secundaria».
El porcentaje mínimo de contenidos aprobados incluirá «la participación efectiva en las actividades escolares tales como clases, tareas y evaluaciones, que expresen los logros y progresos experimentados por las y los estudiantes», precisó la cartera educativa.
Las provincias, para alcanzar estos acuerdos, deberán finalizar al 31 de agosto un relevamiento de las trayectorias escolares del alumnado.
En ese relevamiento las provincias deberán «identificar de manera precisa a aquellos que tuvieron continuidad sostenida, a quienes presentaron trayectorias intermitentes y a quienes alcanzaron una vinculación de baja intensidad».
También se deberá contar con un registro nominalizado de estudiantes desvinculados.