La medida fue adoptada por la magistrada Valeria Vittori, miembro del Tribunal Colegiado de Familia 7ª de Rosario
La Justicia rosarina rechazó el pedido de una mujer que solicitó la anulación de su matrimonio, alegando que su esposo es gay, luego de tenerse en cuenta que la orientación sexual se definió nueve años después de esa unión, informaron hoy fuentes judiciales.
La medida fue adoptada por la jueza Valeria Vittori, miembro del Tribunal Colegiado de Familia 7° de Rosario.
La causa se inició cuando la mujer acusó a su marido de «ocultar» su homosexualidad, ya que «si lo hubiera sabido, jamás hubiera contraído matrimonio».
En tanto, el hombre desestimó las palabras de su cónyuge, explicando a la Justicia que su relación con un hombre se dio por primera vez en 2017, nueve años después de la unión matrimonial.
En consecuencia, la magistrada Vittori sentenció hoy que «resulta inadmisible concebir que la denunciante haya sido engañada en la orientación sexual de su pareja a la fecha de celebración del matrimonio».
Y añadió que «el alegado error en las cualidades personales no se encuentra configurado, es decir, no resulta esencial ni determinante, motivo por el cual corresponde el rechazo de la demanda de nulidad de matrimonio».
Todo comenzó cuando la mujer recibió en su cuenta de correo electrónico una denuncia realizada por su marido, en la que solicitaba la prohibición de acercamiento de otro hombre.
Al ser interrogado por su esposa, el hombre admitió haber realizado la denuncia, ya que recibía amenazas de un tercero que le exigía dinero a cambio de no revelar su vínculo.
Además, el marido sostuvo que la relación fue efímera y que su orientación sexual se definió años después de su matrimonio.