Así lo informó el Servicio Meteorológico Nacional (SMN) según la tendencia del Pronóstico Climático Trimestral del país
El pronóstico climático trimestral emitido hoy por el Servicio Meteorológico Nacional (SMN) prevé para este invierno «menos lluvia de lo normal» y «temperaturas normales o superiores a las normales» en general para todo el país.
La actualización del Pronóstico Climático Trimestral muestra que en todo el país habrá una tendencia de que «las lluvias sean de normales a inferiores a las normales».
Sobre el norte y centro de Patagonia se prevé que las lluvias acumuladas en el trimestre estén dentro de la categoría normal, mientras que hacia el extremo sur de esta región las mayores probabilidades se reparten entre las categorías normal a superior a la normal.
Sobre la región del NOA y norte de Cuyo no se suministra pronóstico de precipitación por ser Estación Seca.
Respecto a las temperaturas, explicaron que «hay una mayor probabilidad de tener un trimestre con temperatura, en promedio, más elevada de lo normal en esa región».
En Cuyo, NOA, La Pampa y oeste de Buenos Aires también se esperan «temperaturas normales o superiores a las normales y, en el resto del país, las mayores probabilidades están en la categoría de temperaturas medias dentro del rango normal».
El pasado mes de junio tuvo 2 períodos bien diferentes, explicaron desde el SMN.
Del día 1 al 14 predominaron condiciones anómalamente cálidas en casi todo el país, y se destacaron récords diarios de temperatura mínima más alta, como los registrados en Neuquén (15.0°C el 1/6) y Malargüe (13.3°C el 1/6), y de temperatura máxima más alta, por ejemplo en Posadas (31.2°C el 4/6), Ituzaingó (30.8°C el 4/6) y en Bernardo de Irigoyen (26.3°C el 5/6).
A partir del día 15 hubo un cambio notorio de las temperaturas con el ingreso de aire polar que avanzó hasta el norte del país.
Laboulaye y Chamical registraron la temperatura máxima más baja para un mes de junio, con 5.8°C y 7.2°C respectivamente.
Además del frío extremo, también se produjeron nevadas en las provincias de Córdoba, San Luis, Mendoza, San Juan, La Rioja, Catamarca y Tucumán.
A partir del día 25 se produjo un segundo ingreso de aire muy frío, que trajo un gradual y sostenido descenso térmico, junto a heladas intensas en todo el oeste argentino.
Un núcleo de aire muy frío en altura se posicionó sobre la provincia de Buenos Aires y provocó, durante el día 27, nevadas inusuales en el noroeste bonaerense y sur de Santa Fe.
Finalmente, esta masa de aire frío avanzó hacia el norte del país, y en los últimos días de junio las heladas y condiciones de ola de frío se hicieron sentir en varias provincias.
Las ciudades de Catamarca, Villa de María de Río Seco y Mercedes alcanzaron la temperatura mínima más baja para junio de las últimas décadas, con -6.2°C, -9.0°C y -2.5°C, respectivamente.
Mientras que Concordia marcaba otro récord de temperatura máxima más baja para junio con solo 7.2°C, la ciudad de Buenos Aires no registraba una persistencia de días tan fríos desde el recordado julio de 2007.