Gabriel Mestre se refirió al mensaje enviado recientemente por el papa Francisco quien elogió la iniciativa que impulsa
El obispo de la Diócesis de Mar del Plata, Gabriel Mestre, destacó hoy «la tarea de caridad de tantas personas» en la asistencia a gente en situación de calle en la ciudad balnearia, y valoró en ese sentido un mensaje enviado recientemente por el papa Francisco, en el que elogiaba el trabajo realizado para brindarles contención y hospedaje ante la llegada del invierno.
En diálogo con Radio Télam, Mestre subrayó el trabajo tanto de los fieles como «de los laicos, las laicas y los voluntarios de estos servicios», para «poder atender de manera más apropiada a las personas en situación de calle», ante el arribo de las bajas temperaturas.
En ese sentido, el prelado explicó que a la atención que brinda cada año a través de la Noche de la Caridad y del Hogar de Nazaret, el Obispado sumó este invierno dos hoteles céntricos que fueron alquilados gracias a aportes de la comunidad marplatense, y que permitirán alojar a más de 60 personas en esa condición, entre el 21 de junio y 21 de septiembre.
«Surgió esta idea de alquilar un hotel gracias a la colaboración de muchas personas. Nosotros dispusimos fondos del Obispado, de la Noche de la Caridad y de Cáritas para esto, pero gracias a la donación de muchas personas pudimos alquilar un segundo hotel durante tres meses, y poder cubrir todo formalmente desde el 21 de junio al 21 de septiembre la realidad de las personas», dijo.
Esta iniciativa fue elogiada días, atrás a través de un video, por el Papa, quien agradeció la atención que reciben las personas en situación de calle desde la diócesis y saludó a los fieles y laicos «de corazón por lo que hacen».
Mestre indicó en ese sentido: «El servicio de la caridad en la Iglesia de Mar del Plata se viene haciendo desde hace más de quince años. Y en este contexto, comunicándome yo con el Papa de manera muy corta por otro tema, sale esta cuestión y el Papa quedó positivamente impactado y es que nos manda este video en el cual valoriza la tarea de caridad de tantas personas para atender a los más pobres entre los pobres, que es la gente en situación de calle», aseguró.
El obispo aseguró que el mensaje del sumo pontífice «anima primero al que colabora en estas obras y al que se ve desafiado a crecer en solidaridad y caridad con alguien que vive en su misma casa, con un vecino, con una compañera de trabajo».
«Esta es la atención en las urgencias que la Iglesia sigue manteniendo además en su planteo pastoral social, de Doctrina Social de la Iglesia, que evidentemente lo interesante sería no tener personas en situación de calle; que el contexto social, la fuente de trabajo, el trabajo, la cultura del trabajo y la producción fueran fuertes en nuestra en nuestra Patria para no tener situaciones de este tipo», dijo.
Aseguró además que «a veces acompañar a las personas en situación de calle no es sencillo», porque «hay personas con problemas severos de adicciones, hay personas con situaciones muy complicadas en lo psiquiátrico, hay personas que han delinquido también, y eso hay que acompañarlos también desde la caridad, desde el servicio, desde la solidaridad».