Por Vilma Ripoll *
En plena crisis y pandemia, el Gobierno y la oposición de derecha toman todo en clave electoral. A estas alturas, no es un misterio definir la situación del país: pobreza creciente, salarios a la baja, un sistema de salud sostenido por trabajadores agotados y con carencias no resueltas por ningún Gobierno.
Por eso estallan las luchas y desde la izquierda acompañamos todas y cada una.
Otro factor es el abandono de la CGT y las CTA a esas demandas.
Le hacen el juego al Gobierno, transan con las patronales y tratan de frenar todo plan de movilización. No viven ni sufren los problemas de los trabajadores. Son el brazo sindical de un Gobierno que, lamentablemente y más allá de modos y ritmos, fue más continuidad que cambio en el modelo capitalista dependiente y de ajuste, respecto del macrismo y los gobiernos anteriores.
Hay decepción por las promesas incumplidas. Como las jubilaciones, una vuelta del asado que no fue. Heladeras lejos de llenarse y trabajadores cada día más pobres.
Por eso, desde la izquierda debemos responder a cada conflicto. Y seguir apoyando a los nuevos luchadores que no esperan a los burócratas y se la juegan ante las patronales y gobiernos.
De cara a las elecciones que se vienen, no es opción la derecha de Juntos por el Cambio. Impulsores del ajuste cuando gobernaron, aspiran a volver a representar los intereses de quienes se enriquecen con la crisis.
Torcerle el brazo a los planes de ajuste del FMI y el Gobierno es posible y necesario. Lo podemos lograr si apoyamos las luchas y al Sindicalismo Combativo. Pero no alcanza porque la salida es política y requiere unir a toda la izquierda política y social, garantizando todos los mecanismos democráticos necesarios.
Desde el FIT Unidad que reúne a la mayoría de las fuerzas y votantes de izquierda, tenemos la responsabilidad de convocar a ampliarlo y unir a toda la izquierda en una gran PASO.
Para ser una voz alternativa para todos aquellos que tienen la idea de apostar a otro proyecto de país. Alzar una tercera voz y pegar fuerte.
Por eso, reiteramos el llamado a Luis Zamora y AyL, al Nuevo MAS y al PO Tendencia a dejar atrás todo sectarismo y dar pasos en la unidad, con un programa de fondo.
Y convocar a referentes sociales, ambientales, feministas, intelectuales y de DD.HH., y a quienes quieran fortalecer un proyecto anticapitalista y socialista.
El FIT Unidad debe asumir está convocatoria. No somos utópicos, sabemos que los acuerdos entre distintas organizaciones son difíciles. Si no se concretan, las PASO son una instancia donde la realidad y el voto de miles y miles puede decidir. Y así armar las listas, distribuyendo los cargos de manera proporcional.
Sin trabas ni sectarismos, podríamos ir a las elecciones siendo una opción para millones.
Necesitamos alzar una tercera voz, que talle con mayor fuerza ante el Frente de Todos y Juntos por el Cambio, que gobiernan nuestro país sin solucionar los problemas estructurales que afectan a millones.
(*) – Dirigente del MST en el FIT Unidad.