El ataque habría sido perpetrado con uno o dos coches-bomba dentro de la Brigada 30 en Cúcuta
Al menos 55 heridos dejó, según un primer informe oficial, un atentado con uno o dos coches-bomba dentro de la Brigada 30 del Ejército de Colombia, en la ciudad de Cúcuta, en el noroeste, hacia donde anoche viajó el presidente Iván Duque.
«Repudiamos el cobarde acto terrorista al interior de la Brigada 30 del Ejército de Colombia en Cúcuta. Toda nuestra solidaridad con los heridos y sus familias», escribió el ministro de Defensa, Daniel Molano en su cuenta de Twitter.
Molano fue la única voz oficial que habló de un acto terrorista, aunque sin mayores precisiones. El ministro fue el primer integrante del gabinete en trasladarse a Cúcuta, por orden de Duque. Ninguna organización se atribuyó la autoría del ataque explosivo, que se produjo a las 15.30 (17:30 de Argentina), cuando una camioneta estalló y provocó heridas a muchas personas que estaba en la zona.
«Ante la explosión de un vehículo al interior de la Brigada 30 del Ejército, en la ciudad de Cúcuta, he dado instrucciones al ministro de Defensa, Diego Molano, para que se dirija a la ciudad y adelante las investigaciones que permitan esclarecer esta lamentable situación», fue el primer mensaje de Duque en su cuenta de Twitter.
Molano viajó a la zona junto al comandante del Ejército, el general Eduardo Enrique Zapateiro, para «verificar la situación» y «activar las acciones pertinentes frente a estos graves hechos». Durante buena parte de la tarde solo se difundieron imágenes desde el Batallón que mostraban daños materiales en algunos edificios de la zona, principalmente ventanas rotas, y era incierta la cifra de heridos, aunque se hablaba de 16.
Recién hacia la noche la cartera de Defensa precisó que había 55 lesionados y crecían las versiones acerca de que los vehículos que explotaron fueron en verdad dos. La agencia Sputnik citó videos que circulaban en redes sociales que mostraban una columna de humo al interior de la sede militar y enseguida una fuerte explosión, por lo que algunos testigos hablaban de dos detonaciones.
Enseguida se barajó como hipótesis que podría tratarse de un acto cometido por el Ejército de Liberación Nacional (ELN), que tiene presencia en la zona.
Pero también porque el 17 de enero de 2019 esa guerrilla fue la responsable de un hecho similar: detonó un vehículo bomba en la escuela de cadetes de la policía General Santander, en Bogotá, lo que dejó 60 estudiantes muertos y 22 más heridos.
Una vez que el ELN se adjudicó el hecho, el Gobierno rompió de manera unilateral las negociaciones de paz que mantenía. Los sitios de los diarios El Tiempo y El Nuevo Siglo hablan de una posible captura de un hombre dentro del regimiento.