El nuevo embajador de Bolivia ante la OEA, Héctor Arce, señaló que uno de los objetivos de su misión será hacer conocer a los 35 países miembros "la verdad de lo ocurrido en octubre y noviembre de 2019"
Bolivia buscará la remoción del secretario general de la Organización de los Estados Americanos (OEA), Luis Almagro, por su accionar durante el golpe de Estado que en 2019 sacó del poder a Evo Morales, ratificó en las últimas horas su representante ante el organismo.
El nuevo embajador de Bolivia ante la OEA, Héctor Arce, señaló que uno de los objetivos de su misión será hacer conocer a los 35 países miembros «la verdad de lo ocurrido en octubre y noviembre de 2019».
«Después de una organización y trabajo certero en lo jurídico estamos listos para que la OEA, todo el continente americano y el mundo conozcan la verdad de qué es lo que ha pasado», anunció en una entrevista anoche con la red de noticias Gigavisión.
En ese sentido, explicó que para eso propondrá la aplicación del artículo 116 de la Carta del organismo hemisférico que indica: «La Asamblea General, con el voto de los dos tercios de los Estados miembros, puede remover al Secretario General o al Secretario General Adjunto, o a ambos, cuando así lo exija el buen funcionamiento de la Organización».
Para Arce, es un «peligro» la permanencia de Almagro al frente del organismo.
Los observadores de la OEA denunciaron «irregularidades» en las elecciones del 20 de octubre de 2019 que iba ganando el entonces presidente Morales.
Esto alentó al motín policial y la «sugerencia» militar de dimisión de Morales que, bajo esa presión, renunció para evitar un baño de sangre mayor del que ya se estaba viviendo y llevó a la autoproclamación de Jeanine Áñez, hoy detenida, como presidenta de facto.
Arce dijo que es necesario conocer de la propia gestión de Almagro aspectos como la formación de la comisión que auditó el proceso electoral con resultados «tergiversados» y «cuáles eran los verdaderos intereses, quizá con un interés contrario a los gobiernos progresistas y revolucionarios de la región, buscaron en Bolivia el elemento de desbalance», según recogió el diario boliviano La Razón.
Arce dijo que espera que los representantes de los Estados miembros tomen conciencia de lo sucedido en Bolivia a partir de la información que recibirán de forma directa.
«Una vez que se forme conciencia a través de información directa que se les proporcione, serán ellos los que deban tomar una determinación en pos de la justicia y de la democracia», reflexionó el exministro de Morales y uno de los asilados tras el golpe de Estado.
Almagro asume su segunda gestión al frente de la OEA y defendió el trabajo del organismo en Bolivia.