CLG recorrió comercios del sector y todos relataron un panorama preocupante. “Ya venía parado y el tema de la pandemia nos terminó de arruinar”, indicaron
La pandemia ha puesto a muchos sectores de la economía en una situación alarmante. Tal es el caso de los comercios de venta y reparación de celulares, que no logran levantar cabeza. Si bien tienen alguna expectativa de reactivación para el Día del Padre, el panorama sigue siendo desolador. CLG recorrió diversos comercios del rubro y sus trabajadores expresaron que la pandemia los “terminó de arruinar”.
“Recién ahora este mes, con el tema del Día del Padre, comenzó a moverse más. Veníamos bastante tranquilos. Estamos remándola y haciendo lo mejor posible para que se venda”, indicó una trabajadora del sector.
Mientras que otra empleada compartió la expectativa de mejoría, pero analizó: “Está todo muy parado. Esperamos que junio sea un mes fuerte, pero estamos a 8 y todavía no se activó la venta. Tampoco hay promociones para que podamos incentivar a la gente”.
Las trabajadoras consultadas por CLG coincidieron en afirmar que por la situación económica, la gente también se cuida el bolsillo con la tecnología. “El panorama está complicado. No es como antes que la gente cambiaba el teléfono por gusto. Ahora si no se lo roban o lo pierde, no lo cambia”, indicaron.
“Los teléfonos se compran por necesidad. El teléfono más económico, de lo bueno está en 30 mil pesos. Lo más económico 15 mil pesos, sin memoria ni buena cámara; de ahí ya nos vamos a 22 mil pesos y después de 30 mil para arriba”, afirmó una comerciante. Mientras que otra aseguró que los celulares de gama alta rondan los 70 mil pesos.
“Los precios aumentan todas las semanas”, aseguran las trabajadoras. Además, las ventas por internet tienen mejores promociones, por lo que “la gente no viene a los locales y eso nos está matando. Prefieren esperar unos días más, pero comprar más barato”.
Asimismo, una de las trabajadoras comentó en carne propia esta triste realidad: “Nosotros es el último mes que trabajamos, la empresa cierra porque es imposible sostener el local cuando entran diez personas por día. Nos hacen la liquidación y nos quedamos sin trabajo”.
Al aumento que se ve en todos los productos de consumo cotidiano en el país, en este rubro se suma el hecho de que los celulares son importados, al igual que algunos de los repuestos.
Uno de los comercios que, además de venta hace reparaciones, comentó: “Nos manejamos mucho con reparaciones y servicio técnico. Por ahí no se consiguen los repuestos. La gente no tiene dinero para arreglar. La venta está parada hace meses. La gente prefiere arreglar el teléfono que tiene en uso, no piensa en comprar uno nuevo”.
“La mercadería que vendemos viene de afuera, así que está por las nubes”, afirmó una de las trabajadoras, al tiempo que se esperanzó: “Espero que pase la pandemia y la situación mejore la situación para todos”.