El hecho se dio en la ruta provincial 65 entre Maciel y Díaz, Pablo y Diego pudieron salvar a este animal que forma parte del grupo de riesgo de extinción
Diego transitaba normalmente por la ruta provincial 65 entre la localidad de Monje y Díaz, junto a su amigo Pablo, sin embargo en un sector de la banquina, a 200 metros del canal Irigoyen, pudieron ver algo que les llamó poderosamente la atención. Frenaron, se bajaron de su camioneta y reconocieron fácilmente a un aguará guazú lastimado luego de ser atropellado y abandonado.
Los jóvenes sin titubear ataron al animal con unas sogas que tenía y lo subieron a la parte de atrás de su vehículo. Fue hasta Díaz y se acercaron a la comisaría, pero no encontraron soluciones para el malherido animal. Es por eso que rápidamente lo llevaron al campo de un amigo y llamaron a Parques Nacionales.
Allí le dieron rápida atención y el operativo a cargo del jefe de Guardaparques del Parque Nacional Islas de Santa Fe, Luciano Machado, logró dar con esta especie en peligro de extinción.
Luego de una primera atención en la veterinaria de la Dra. Alejandra Pizzolito, se pudo constatar que el ejemplar no tiene lesiones graves por lo que será llevado a una graja para su conservación.
Es una hembra joven y sólo presenta una fractura en una de sus patas delanteras. «Tiene fractura de radio y cúbito. Hicimos una ecografía de torax y abdomen y no presenta ninguna lesión interna. Le pusimos una vía para hidratarla y está estable», dijo la veterinaria en diálogo con Infomas de Maciel.
La profesional se vio asistida por la Granja La Esmeralda, que guió de manera remota la asistencia. Este establecimiento es el único de la provincia autorizado a recuperar y alojar a estos animales silvestres.