Unos 135 despedidos por la empresa estadounidense Bunge Ltd. volvieron hoy a sus funciones en la planta de fertilizantes en la localidad bonaerense de Campana por la conciliación obligatoria dictada por el ministerio de Trabajo provincial.
No corrieron con la misma suerte los 30 operarios que estaban como «contratados» y fuera del convenio colectivo, a quienes se les ratificó el cese de la relación laboral.
Los operarios ingresaron a la planta pero sin tener asignadas tareas, dado que la empresa estadounidense decidió bajar líneas de producción de fertilizantes ante la falta de demanda por el ingreso de productos del exterior a valores más bajos.
La delegación Campana del ministerio de Trabajo de la Provincia de Buenos Aires dictó ayer la conciliación obligatoria en una audiencia con representantes gremiales y autoridades de la empresa Bunge por los despidos en la planta del Complejo Industrial Campana.
Voceros del Sindicato del Personal de Industrias Químicas y Petroquímicas Zárate-Campana señalaron a la prensa local que la conciliación tiene una duración de cinco días, por lo que su vigencia culminará el viernes.
En la audiencia realizada en calle Sívori 730, estuvieron presentes referentes gremiales encabezados por el secretario general del Sindicato del Personal de Industrias Químicas y Petroquímicas Zárate, Norberto Lubo, mientras que por parte de la empresa asistió un letrado patrocinante.
Luego de diez horas de negociaciones infructuosas, las autoridades de la cartera laboral decidieron dictar la conciliación obligatoria por el plazo de cinco días.
La cartera laboral bonaerense volvería a convocar a una nueva audiencia para el lunes.