Los trabajadores de la agencia Télam siguen sin tener novedades sobre su futuro laboral. Son 357 los empleados cesanteados, quienes representan el 40% del total de la planta, y aún no hay respuestas. Es por eso que el Sindicato de Prensa de Rosario (SPR), volvió a salir a la calle este jueves para exigir la reincorporación de los despedidos.
En una movilización llevada a cabo este jueves por la mañana en el cruce de las peatonales Córdoba y San Martín, dirigentes y trabajadores de prensa se acercaron con pancartas y repartieron volantes que rezaban “No a los despidos en Télam”.
Juan Pablo Sarkissian, integrante del Sindicato de Prensa, dialogó con CLG sobre la complicada realidad que atraviesan los trabajadores de la agencia de noticias que está de paro desde hace varios días: “El gobierno ataca a todos los trabajadores, y los de prensa no somos una excepción”.
“Este es un gobierno que dentro de sus políticas públicas tiene la expulsión de los derechos de los trabajadores. Desde que asumieron, llevamos casi 3.500 puestos de trabajo perdidos”, señaló Sarkissian.
“El de Télam es un caso emblemático por el que estamos peleando en todo el país. Hay empleados que tienen más de 25 años de antigüedad. Ya llevamos un mes y la planta está tomada por los trabajadores de manera pacífica. Se han hecho todas las presentaciones que corresponden y ha habido marchas nacionales y provinciales. Estamos tratando de que se esclarezca de qué se trata el conflicto”, continuó.
Asimismo, enfatizó: “El Ministerio de Trabajo es cómplice de esta situación. En lugar de mediar entre el capital y el trabajo, lo que hace es fallar a favor del empresario. No sólo no defiende los intereses de los trabajadores, sino que defiende este brutal despido”.
“Estos episodios tienen muy poco registro dentro de la historia argentina. Solamente en épocas muy oscuras se han visto avasallados de esta manera los derechos de los trabajadores”, expresó.
En otro orden, Mateo Fabre, corresponsal de Télam en Rosario, también dialogó con este medio y esgrimió: «Esta misma actividad se está repitiendo en todo el país. Nosotros consideramos que esto es un vaciamiento y no una reestructuración como dicen ellos. El plan de fondo es cerrar la agencia, porque sin estos 357 trabajadores la planta no puede funcionar«.
«Entre los despidos no sólo hay periodistas, hay gente de logística y técnica. Lo que hicieron fue vaciar la empresa porque sin esa gente no hay nadie que controle las computadoras o maneje ciertas cuestiones que son vitales para el funcionamiento de Télam. No es solo una cuestión ideológica«, afirmó Fabre, quien es el único de los 357 despedidos que es de Rosario.