De acuerdo a fuentes policiales, el joven de 19 años había sido expulsado del boliche Mr. Jones, ubicado en la zona de Playa Grande, por un incidente dentro del local
Un joven de 19 años murió hoy en Mar del Plata, luego de que debiera ser hospitalizado por los golpes que recibió por parte de personal de seguridad de un boliche del que fue echado, según informaron fuentes judiciales y policiales.
La víctima fue identificada como León Haziel Luna, y su fallecimiento se produjo a las 4.45, en el Hospital Interzonal General de Agudos (HIGA) de la localidad balnearia, media hora después de que allegados lo trasladaran tras desvanecerse en la casa de su novia, un año menor que él.
De acuerdo a fuentes policiales, Luna había sido expulsado cerca de las 3 del boliche Mr. Jones, ubicado en la zona de Playa Grande, por un incidente dentro del local.
Según relató la novia del joven al fiscal Fernando Castro, titular de la Unidad Funcional de Instrucción 1 que interviene en la investigación del hecho, el personal de seguridad del local lo tomó del cuello para sacarlo del lugar.
La joven explicó que se colgó del brazo de uno de los custodios para evitar que lastimaran a Luna, y que al encontrarse con él fuera del boliche, él aseguró que había sido golpeado por el personal de seguridad.
Una vez fuera del local, los jóvenes llamaron a los padres de la novia para que los fueran a buscar, pero al llegar al domicilio el joven sufrió una descompensación y fue trasladado inconsciente al HIGA.
El fiscal ordenó la realización de la autopsia durante la tarde, y dispuso además el análisis de cámaras de seguridad y la identificación de todos los custodios del boliche.
La investigación fue caratulada preliminarmente como «averiguación de causales de muerte», pero a partir del resultado de la autopsia el hecho podría ser calificado como «homicidio», según indicaron a Télam fuentes del caso.
Fuentes policiales indicaron por otra parte, que en el mismo boliche, cerca de una hora después de la expulsión de Luna, otro joven de 22 años sufrió una fractura en la mandíbula al ser echado por el mismo personal de seguridad.
En su caso, efectivos policiales que se encontraban cerca lo asistieron y lo trasladaron en un móvil al Hospital Privado de Comunidad, donde fue asistido y recibió el alta horas más tarde.
Además de la fractura, este joven, cuya identidad no fue precisada, presentaba pérdida de piezas dentales y otros golpes en el rostro.