Los chicles, como así también las colillas de cigarrillos son contaminantes para el medio ambiente, pero frecuentemente terminan en el piso. En la capital de Ámsterdan una ciudadana ha tenido una idea que puede cambiar esta circuntancia, recolectando y reciclando chicles de toda la ciudad.
Jolande Penninks es la fundadora de Gumbudy, la organización encargada de la recolecta que se realiza en Ámsterdan y también en otras ciudades como Róterdam, mediante la instalación de tableros en lugares concurridos, como shoppings o estaciones de transporte público. Al mismo tiempo, y gracias a una asociación con el Ayuntamiento, ha logrado introducir la temática en las escuelas, poniendo énfasis en el impacto ambiental que trae arrojar estos residuos al suelo.
Con el material recolectado, y con la ayuda de los municipios del área metropolitana de la ciudad, lanzaron Gumshoe, un calzado a base de chicles, el primero de su tipo en el mundo. De esta manera, se da una segunda vida a un residuo que tarda años en degradarse por vías naturales, y se genera un producto útil mediante el reciclado.
“Nuestro compromiso diario es brindar a la gente buenas condiciones de vida, trabajo y ocio en la capital de Holanda”, declaró Mustafa Tanriverdi, del Área Metropolitana de Ámsterdam.
https://youtu.be/f155BH2MErE