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Caso Bocacha: a un año de su muerte, familiares y amigos renuevan el pedido de justicia


Este miércoles presentarán un proyecto en el Concejo para la creación de un espacio de memoria en el sitio en el que funcionaba el boliche Ming, donde el joven fue visto por última vez

A un año de la muerte de Carlos Orellano, sus familiares y amigos renuevan el pedido de justicia y presentarán un proyecto en el Concejo para la creación de un espacio de memoria en el sitio en el que funcionaba el boliche Ming, donde Bocacha fue visto por última vez con vida.

La presentación será este miércoles, día en que se cumple un año del fallecimiento del joven cuyo cuerpo sin vida apareció flotando en el río Paraná, luego de haber ido a bailar al local ubicado en la zona de la Fluvial. El objetivo principal de la propuesta es que allí funcione un centro de asistencia a las víctimas y en el que se promuevan actividades culturales.

“Queremos que en ese espacio funcione un sitio de memoria, tanto por Bocacha como por todos los pibes y pibas que padecieron algo parecido”, señaló Edgardo Orellano, papá de Carlos, y detalló: “Y más que nada, un centro de asistencia a las víctimas en el que se capacite a profesionales para que atiendan a las querellas, porque el Estado le pone abogados a los victimarios, a los asesinos, y cualquiera tiene derecho a un abogado defensor, pero los familiares de las víctimas no tienen la posibilidad de acceder a un asesoramiento y acompañamiento jurídico gratuito.Por eso queremos llevar adelante una orientación en derechos humanos, con abogados, antropólogos, médicos y peritos forenses, que se dediquen a defender a la gente de escasos recursos que pasan por una situación parecida”.

En cuanto al aspecto cultural del proyecto, Edgardo argumentó: “Carlos era percusionista. Tocaba percusión en la cancha y el bombo en festivales folclóricos o peñas. Y la música era su pasión. Por eso entendemos que una buena manera de homenajearlo es que en ese sitio también haya lugar para la música, para las artes en general. Y sobre todo orientado a la juventud, para brindarles contención, para que encuentren un horizonte ahí que les permita salir adelante, a través de talleres, de educación y de oportunidades, que es lo que menos tienen y más necesitan”.

Posteriormente a la presentación del proyecto en el Concejo, se realizará una conferencia de prensa en la puerta del Palacio Vasallo, alrededor de las 11, en la que la familia y los letrados que la acompañan brindarán más detalles.

Además, a las 18, en el sitio en el que se proyecta construir el espacio de memoria, en cercanías de la Estación Fluvial, se llevará a cabo un acto recordatorio en homenaje a Carlos Orellano organizado por sus familiares y amigos.

 

¿Cómo está la causa?

El 23 de febrero de 2020 Bocacha fue a bailar con amigos. Durante la madrugada del 24 fue sacado por la seguridad del lugar porque supuestamente intentó pasar al sector vip, reconstruyó su familia. El cuerpo fue hallado flotando en el río a la altura del muelle III de las instalaciones de La Fluvial el 26. Luego de muchos reclamos de la familia y diversas medidas probatorias, la última un informe del Instituto de Biodiversidad y Biología Experimental y Aplicada de la UBA sobre la médula ósea de Bocacha que concluyó que el joven cayó con vida al agua, el fiscal Saldutti le imputó la muerte a cuatro personas.

Se trata de dos vigiladores y dos empleados policiales que hacían adicionales en el boliche Ming River House el 24 de febrero del 2020. Según la acusación fiscal, la víctima fue retirada del local bailable y en el interior del complejo La Fluvial lo rodearon contra la baranda a la altura del muelle III, y aprovechando su superioridad numérica y física lo golpearon y condicionaron a saltar la baranda y tirarse al río. Su cuerpo emergió dos días después en el Paraná. El juez actuante tuvo por formalizada la audiencia y dejó al cuarteto detenido preventivamente.

Según la teoría de la acusación, luego de sacar a Orellano del local, entre las 4.30 y las 5 la custodia mixta del local rodeó a la víctima en el interior del complejo, lo arrinconó contra la baranda a la altura del muelle III y aprovechando la superioridad numérica y física ejerció violencia: los custodios lo golpearon determinándolo a saltar la baranda y arrojarse al río.