La fábrica automotriz no pudo abrir este martes la planta de Zárate por no conseguir el número suficiente de operarios. Los trascendidos indican que la falta de interés estaría vinculada al impacto del impuesto sobre las horas extra
Toyota Argentina pretendía poner en marcha este martes feriado su planta de Zárate. Sin embargo, la intención de la empresa se truncó al no conseguir la cantidad necesaria de operarios para poner en marcha las líneas de montaje de las Hilux y SW4. Las razones estarían relacionadas directamente al gran impacto que tiene el Impuesto a las Ganancias en las horas extra.
Esta situación se repite a menudo en diversas áreas de la producción de la Argentina por la vigencia de un impuesto que muchos trabajadores sienten como injusto e inadecuado.
La empresa no lo confirmó oficialmente, pero todo indica que la falta de interés de los trabajadores es por la vigencia del Impuesto a las Ganancias en los pagos por horas extra: gran parte de ese ingreso se lo queda el Estado.
Tras conocerse este hecho, los diarios Ámbito Financiero y Clarín dieron a conocer la información, sacando cuentas de las distorsiones que genera este impuesto al trabajo y de los ingresos que el Fisco perdió con este esquema: se dejaron de fabricar 600 vehículos que habrían generado muchos más dólares y pesos de que los que se recauda por el impuesto a los trabajadores.