Los restos fueron hallados en un bosque de Carolina del Sur. El lugar se remontaría al período de la ley seca, en los años 20
Un grupo de arqueólogos de la Universidad estadounidense de Tennesse descubrió en el bosque Francis Marion, de Carolina del Sur, una aparente fábrica clandestina de alcohol vinculada al legendario gánster Al Capone.
Según indicaron medios locales, en el lugar se hallaron bloques de cemento, barriles, una manguera de jardín y otros artefactos empleados en el proceso de destilación de bebidas alcohólicas.
El lugar se remontaría a la época de la ley seca de los años 20, en el país del norte de América. Según informa Charleston Post Courier, los expertos descubrieron un pozo de casi cuatro metros, así como láminas metálicas, provisiones de carbón y varios elementos utilizados para calentar el líquido con ayuda de un alambique.
Las instalaciones se encuentran cerca del antiguo domicilio de Benjamin Villeponteaux, un cómplice de Al Capone en el negocio de contrabando de licores, quien habría operado esta planta clandestina hace aproximadamente 100 años.
Los expertos estiman que, tras la muerte de Villeponteaux en un tiroteo, la fábrica continuó funcionando en manos de contrabandistas rivales. Durante la prohibición de venta, la zona, conocida como ‘Hell Hole Swamp’ (Pantano del agujero del infierno, en español), fue famosa por ser uno de los principales puntos de producción de alcohol ilegal.
Según el reporte, el propio Al Capone visitaba las instalaciones frecuentemente a bordo de una lujosa limusina para supervisar el negocio.