Por Enrique Genovar
Más allá de las formas en el fútbol hay que ganar. Y hacerlo en un debut de temporada no tiene precio. El Central del Kily logró los tres puntos en el inicio de un camino largo y por eso la primera presentación del equipo fue positiva. El Canalla jugó de mayor a menor con un nuevo sistema y con jugadores que llegaron al encuentro compartiendo un par de entrenamientos todos juntos.
El primer tiempo de Central fue muy bueno. Generó varias situaciones, casi no sufrió en defensa (salvo en algunos centros) y se fue al vestuario luego de aprovechar una ráfaga de goles que terminaron inclinando la balanza hacia el resultado que se terminó dando, el de la victoria.
En el segundo el rival se llevó por delante. Es que a pesar de tener ocasiones para liquidar el juego Central se quedó sin nafta y esto fue aprovechado por Argentinos, que más allá del descuento no generó más situaciones.
En líneas generales fue una muy buena presentación. Es que el final de la temporada pasada había dejado muchas dudas, muchos signos de interrogación. Pero el cambio de sistema, los dos refuerzos que jugaron de entrada, la nueva posición de Villagra y de Gamba, la presencia de Zabala y el oportunismo de Martínez Dupuy le dieron un vuelo muy positivo al equipo.
Broun, sin mucho trabajo demostró lo que siempre supo tener: voz de mando. A partir del arquero el Canalla ganó en solidez con respecto al pasado. Gastón Ávila, con su técnica y velocidad, hizo que Joaquín Laso solamente te tuviera que ocupar por lo propio y fue uno de los mejores del equipo.
En el medio el doble cinco fue amo y señor de la cancha, hasta que Rinaudo se quedó sin piernas y tuvo que salir con hielo en su rodilla. Villagra jugó donde debe y terminó como figura. Zabala por la derecha y Gamba por la izquierda también le dieron mejor funcionamiento al equipo y ambos redondearon una muy buena noche. Arriba el juvenil Martínez Dupuy convirtió por primera vez y hasta pudo hacer otro, con él equipo tuvo presencia en el área rival.
Central ganó y si bien sufrió de más, el hecho de haberlo logrado en el primer partido de la temporada no tiene precio. El camino es largo y seguramente será sinuoso, al equipo le faltan al menos dos titulares de acuerdo al ideal del Kily, pero mientras espera por ellos lo hace con los tres primeros puntos en el bolsillo.