Con estos números la cantidad de personas fallecidas alcanza a 48.985 y son ya 1.970.009 los casos positivos desde el inicio de la pandemia
Otras 285 personas murieron y 8.374 resultaron contagiadas de coronavirus en las últimas 24 horas en la Argentina, mientras avanza la campaña de vacunación en adultos mayores, un sector que según dijo la titular del PAMI, Luana Volnovich, observó una «adhesión increíble» en la provincia de Buenos Aires.
Según las cifras oficiales informadas esta tarde, el total de personas fallecidas desde el inicio de la pandemia se elevó a 48.985, en tanto que los infectados llegaron a 1.970.009, de los cuales 1.763.762 son pacientes recuperados y 157.262 casos confirmados activos.
La cantidad de personas internadas en terapia intensiva en todo el país es de 3.550, mientras el promedio de ocupación de camas es de 55,4% a nivel nacional y de 61,1% en el Área Metropolitana Bonaerense (AMBA).
Los casos positivos registrados hoy por provincia fueron los siguientes: Buenos Aires 3.483, Ciudad de Buenos Aires 1.086, Catamarca 110, Chaco 159, Chubut 273, Corrientes 256, Córdoba 549, Entre Ríos 254, Formosa 9, Jujuy 43, La Pampa 90, La Rioja 24, Mendoza 180, Misiones 198, Neuquén 319, Río Negro 233, Salta 90, San Juan 45, San Luis 10, Santa Cruz 185 , Santa Fe 495, Santiago del Estero 90, Tierra del Fuego 49 y Tucumán 144.
En este contexto, la titular del PAMI, Luana Volnovich, precisó que la campaña de vacunación contra el coronavirus para afiliados de ese organismo se inició esta semana en residencias de larga estadía con una «adhesión increíble» en la provincia de Buenos Aires, donde el plan de inmunización contempla «la totalidad de las residencias» en ese territorio.
La directora ejecutiva del organismo informó que la campaña se inició el sábado pasado y se desarrolló durante «toda la semana», y explicó que, «a pedido de la provincia de Buenos Aires, el PAMI va a vacunar en la totalidad de las residencias geriátricas, que suman más de 2.000, donde viven muchos afiliados y trabajadores de la salud que pasaron un año difícil».
En este sentido, precisó que «se vacuna a los residentes y a los trabajadores con una logística escalonada, a medida que va llegando la vacuna», lo cual afirmó «nos permitió esta semana un dispositivo masivo, que está funcionando bien».
«De todas las residencias a las que fuimos, en dos o tres, una sola persona no se quiso vacunar, por lo que la adhesión es increíble tanto de trabajadores como de residentes», destacó en declaraciones a Radio 10.
Por otro parte, y en pleno debate acerca de si es posible el contagio de coronavirus por tocar una superficie, Télam dialogó con el biólogo Emanuel Goldman, profesor de la Universidad de Rutgers (New Jersey, Estados Unidos) y con la viróloga argentina Sandra Cordo, quienes explicaron que existe «poca evidencia» de esta vía de transmisión, por lo que los «esfuerzos» deberían estar puestos en el uso correcto de barbijos y la ventilación, aunque no desalentaron la limpieza y la higiene de manos.
«Poco o nada. Sólo dos o tres posibles casos en la literatura científica, pero ni siquiera estos están probados», respondió a Télam Goldman, profesor de microbiología de la Facultad de Medicina de Rutgers al ser consultado sobre la evidencia del contagio del coronavirus por fómites o transmisión por una «superficie infectada».
Ya en julio de 2020, Goldman escribió un artículo en la revista científica británica The Lancet en el que alertaba que «se ha asumido un riesgo clínicamente significativo de transmisión del SARS-CoV-2 por fómites (superficies u objetos inanimados) sobre la base de estudios que tienen poca semejanza con escenarios de la vida real».
En esta nota, realizaba una revisión de los estudios que habían arrojado que el virus podía sobrevivir dos y hasta seis días en algunas superficies, lo que para el especialista, era producto de dos factores: un inóculo de virus muy elevado y condiciones especiales de laboratorio para su conservación. «No estoy discutiendo los hallazgos de estos estudios, solo la aplicabilidad a la vida real», indicaba.
En el plano internacional, volvieron a multiplicarse las negociaciones entre los países para asegurarse las vacunas que ya cuentan con aprobación científica global como la rusa Sputnik V, que cosechó elogios de la Unión Europea y Estados Unidos.
También se conocieron nuevas voces de reclamo para que las inmunizaciones sean distribuidas de manera justa y no con un criterio comercial que dejaría privadas del preciado fármaco a las naciones más empobrecidas.
El Vaticano se sumó hoy a ese reclamo y pidió «promover» la producción local de vacunas en América Latina, África y Asia, al tiempo que propuso «aliviar» la deuda de los países más pobres para liberar fondos que permitan fortalecer sus sistemas de salud.
En un comunicado conjunto con Cáritas Internacional, la Santa Sede convocó a «promover la producción local de vacunas en diversos polos técnicos en África, América Latina y Asia, y volverlas disponibles en los próximos meses afrontando el tema de las patentes y la colaboración a nivel técnico con las naciones más pobres».
Mientras tanto, la velocidad de la propagación del virus en sus distintas mutaciones impulsó al director general de la Organización Mundial de la Salud (OMS), Tedros Adhanom Ghebreyesus, a reclamar a las compañías farmacéuticas un «aumento masivo de la producción» de vacunas.
En rueda de prensa, desde la sede de la OMS en Suiza, Tedros celebró hoy la iniciativa del laboratorio Sanofi de poner a disposición su infraestructura de fabricación para apoyar la producción de la vacuna de Pfizer/BioNTech.