La próxima cita olímpica sería la de París 2024, ocho años después de la de Río de Janeiro
No pasó siquiera un año desde la última gran noticia olímpica. El 24 de marzo pasado, el COI, aturdido en un laberinto de intereses, decidió aplazar los Juegos Olímpicos Tokio 2020 para 2021. Pero ahora todo se desmorona. A la espera de una vacunación masiva y en medio de un nuevo rebrote de coronavirus, el gobierno japonés habría decidido cancelar los Juegos y tratar de asegurarse la plaza para la ciudad para 2032, el año disponible en el calendario olímpico.
Así lo informa el diario británico The Times, citando a un alto miembro de la coalición gobernante en Japón. «Los Juegos, ya postergados, ahora están condenados», sentencia esa fuente, según consigna el periódico. Así, la próxima cita olímpica sería la de París 2024, ocho años después de la de Río de Janeiro. Y la siguiente, Los Ángeles 2028.
La misma fuente oficial anónima citada por The Times explica que «el objetivo ahora es encontrar una forma de anunciar la cancelación que salve las apariencias y que deje abierta la posibilidad de que Tokio sea el anfitrión en una fecha posterior». Y añade: «Nadie quiere ser el primero en decirlo, pero el consenso es de que es demasiado difícil que se pueda realizar los Juegos este año». Una reprogramación sería la enésima oportunidad de que Japón utilizara un traspié como combustible, más allá que el embrujo olímpico vuelva a apoyarse sobre su tierra.
Los Juegos modernos sufrieron boicots (Moscú 1980 y Los Angeles 1984) y atentados terroristas (Múnich 1972 y Atlanta 1996) y hasta se vieron sacudidos por enfermedades (el zika en Río de Janeiro 2016), pero nunca habían dejado de celebrarse en tiempos de paz (las cancelaciones fueron las de Berlín 1916, por la Primera Guerra Mundial, y Helsinki 1940 y Londres 1944, por la Segunda). Aunque los asiáticos ven en el espejo retrovisor el golpe de 1940: a comienzos de la década anterior, las autoridades japonesas presentaron la candidatura de Tokio para los Juegos de 1940 como un medio de mostrar al mundo su reconstrucción tras el devastador terremoto de Kanto, en 1923, pero las acciones bélicas en China derivaron en una presión diplomática que dejó sin sede a la capital nipona.
Aplazamiento o nada: la versión del COI
Mientras Japón cree que ya no hay tiempo para realizar los Juegos, el COI intenta salvarlos. En las últimas horas se conoció la intención de «unos Juegos sin público». «La cuestión es: ¿es esto algo ‘imprescindible’ o ‘bonito’? Es bonito tener espectadores. Pero no es imprescindible», señaló el ex vicepresidente del Comité Olímpico Internacional, Dick Pound. Aunque Pound ya no forma parte de la junta del COI que toma las decisiones, sus declaraciones vienen teniendo impacto en los últimos meses.
Según la agencia AP, el 80% de los japoneses cree que el evento no se celebrará o no debería celebrarse ante el aumento de los contagios, a partir de sondeos recientes en el país. Pound, veterano funcionario olímpico canadiense y presidente inaugural de la Agencia Mundial Antidopaje, reiteró lo que el COI y los organizadores locales repitieron durante meses: que los juegos se cancelarán si no pueden ser celebrados este año. No habrá otro aplazamiento. «Es 2021 o nada», dijo.