Según informó la Unión Industrial Argentina, la industria creció un 2,2% en noviembre, aunque aún se ubica un 2,3% debajo de los niveles previos a la pandemia
La actividad industrial creció 2,2% interanual en noviembre último, pero todavía se encuentra por debajo de los niveles pre pandemia, informó hoy la Unión Industrial Argentina (UIA).
La entidad afirmó que para este año espera «una recuperación generalizada del entramado productivo», que dependerá de «la normalización de las regulaciones en el mercado de trabajo, así como incentivos concretos a la inversión dado el elevado nivel presión tributaria, el bajo nivel de crédito y tasas altas».
Según el informe, el crecimiento interanual de noviembre fue del 3,7% en la medición desestacionalizada: así, retomó la tendencia positiva de septiembre y se recortó la baja acumulada del año a 7,3% entre enero y noviembre.
Con respecto a los niveles de pre pandemia (febrero 2020), todavía se ubica por debajo: 2,3%.
La UIA detalló en su último informe que el repunte de la actividad fabril a lo largo del mes, correspondió a la expansión de diversos sectores que ya habían mostrado signos de recuperación en meses anteriores.
Este es el caso de los Automotores (+20,2%) que mostraron un buen desempeño, principalmente, por el aumento de las ventas de autos nacionales a concesionarios.
Por su parte, el bloque de Minerales no metálicos (+19%) registró el tercer aumento interanual consecutivo, producto de los mayores despachos de cemento Portland, así como el incremento en los insumos para la construcción por la reactivación de las obras.
Papel y cartón también mejoró (+3,8%), y fue traccionado por el incremento en papel paraembalaje, para corrugar y papel tissue.
En tanto el sector de Sustancias y productos químicos (+2,8%) también se incrementó durante noviembre por el aumento en todos los subrubros, a excepción de gases industriales.
En el caso de la industria Metalmecánica (+2,6%) también se consolidó la tercera suba interanual, motorizada, en gran medida, por la industria automotriz, metálica básica y la maquinaria agrícola.
Finalmente, el sector de Alimentos y bebidas (+1,2%) revirtió la merma del mes anterior, impulsado por los productos lácteos, chocolates, vinos y carnes, de acuerdo con el reporte de la central fabril.
Por otro lado, hay sectores que atenuaron el incremento del indicador, aunque recortaron la contracción con respecto a los meses anteriores.
Este es el caso de Refinación del petróleo (-15,1%) que registró una nueva contracción producto de la merma en petróleo procesado y en subproductos obtenidos.
La industria Metálica básica (-3,7%) continuó cayendo en noviembre por la baja producción de aluminio (-35,7%), mientras que la producción de acero marcó un nuevo aumento (+9,3%) impulsado por la construcción, el sector agrícola y automotor.
Por su parte, los Productos textiles (-2,7%) volvieron a contraerse por la merma en preparación de fibras de uso textil, y tejidos y acabados de productos.
Por último, los productos del tabaco (-1,9%) registraron la segunda merma consecutiva, estabilizando sus niveles de producción, luego de varios meses en los que se recuperó la parada de plantas durante los primeros meses de la cuarentena, detalló la UIA.
En este contexto heterogéneo -señaló la entidad empresaria- la utilización de la capacidad instalada de la industria se ubicó en 63,3% en noviembre de acuerdo con el INDEC, 2,6%. más que un año atrás.
Con respecto al sector externo, durante noviembre se acentuó la tendencia de los últimos meses: por la «elevada y persistente» brecha cambiaria, las exportaciones industriales retrocedieron -40,6%, la mayor caída interanual desde junio, por una caída casi generalizada tanto en los destinos como en los productos, advirtió la central fabril.
Y añadió que los primeros datos interanuales de actividad de diciembre mostraron una tendencia similar a la de noviembre.
En este marco, la UIA consideró que de no mediar problemas macro-cambiarios que modifiquen la trayectoria del tipo de cambio oficial y afecten el desempeño de la actividad interna y los costos, se espera para 2021 «una recuperación generalizada del entramado productivo, luego de tres años de fuertes caídas».