El hecho ocurrió en la localidad bonaerense de Sierra de los Padres, donde la Justicia procesó al acusado de asesinar de un balazo en el cuello a María Florencia Ascaneo
Una jueza procesó con prisión preventiva a un sereno de 57 años acusado de asesinar de un balazo en el cuello, el 4 de enero pasado, a una comerciante del paseo de compras de la localidad bonaerense de Sierra de los Padres que lo iba a denunciar por el abuso sexual de una menor de edad, informaron hoy fuentes judiciales.
Se trata de Gustavo Rafael Sensán (57), a quien la jueza de Garantías de Mar del Plata, Lucrecia Bustos, le imputó el «homicidio criminis causa» de María Florencia Ascaneo (41), quien fue baleada delante de su familia en el centro comercial en el que tanto ella, como el ahora acusado, trabajaban.
Fuentes judiciales informaron a Télam que el procesamiento fue dictado en las últimas horas tras el pedido del fiscal Leandro Arévalo, de la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) 7 marplatense.
De acuerdo al fallo de la jueza al que accedió Télam, el acusado actuó «con el fin de ocultar otro delito y para asegurar su impunidad», en este caso, el abuso de una niña menor de edad.
También se le atribuyó el delito de «portación ilegal de arma de fuego de uso civil», por la pistola utilizada para consumar el crimen.
La hija de la víctima, quien presenció el crimen de su madre, aseguró ante la Justicia que el homicida dijo, momentos antes de extraer el arma de entre sus ropas y ejecutar a su víctima: «Ustedes están diciendo mentiras sobre mí».
Según la testigo presencial, el agresor «estaba tranquilo y sin gritar», aunque no pudo distinguir si estaba drogado o alcoholizado.
Por su parte, Carlos Zeccini, el esposo de Ascaneo, declaró que se encontraba junto a la hija de ambos y su mujer cuando ocurrió el ataque y señaló a «Gustavo» como el autor del disparo.
El hombre contó que al creer que el atacante iba a seguir tirando, se puso a resguardo junto a su hija detrás del mostrador de su comercio y le arrojó un frasco al tirador, al quien se le cayó el arma.
«En ese momento se reincorpora y sale a retenerlo, lo saca del local y comienza a efectuar golpe de puño a Gustavo», señaló el fallo y agregó que fueron otras personas que se hallaban en el paseo de compras quienes retienen al agresor antes de que llegue la Policía, al tiempo que el esposo y la hija de Ascaneo trataron de auxiliarla.
La jueza también valoró que otras personas que no fueron testigos presenciales del hecho también «sindicaron al encartado como presunto responsable del mismo» y las imágenes de las cámaras de seguridad de uno de los locales comerciales que registraron la secuencia del accionar del sospechoso.
A su vez, la magistrada consideró que el acusado debe seguir detenido ya que en libertad «podría procurar entorpecer la investigación penal en curso», por lo que Sensán seguirá alojado en la Unidad penal 44 de Batán.
Por último, la jueza aceptó al viudo Zeccini como particular damnificado en la causa.
El hecho ocurrió alrededor de las 12.30, en un local de productos de granja «La Familia», perteneciente a Ascaneo y ubicado en el primer piso del centro comercial «Paso de las Cabras», en avenida Argentina y calle Arturo, en pleno centro de Sierra de los Padres, a unos 15 kilómetros de la ciudad de Mar del Plata.
De acuerdo a los testimonios obtenidos por personal policial, el ahora imputado desempañaba algunas tareas como sereno o cuidador en el mismo paseo de compras, donde finalmente fue detenido por personal de la comisaría 14ta. de Sierra de los Padres.
En aquella oportunidad, el fiscal Arévalo contó que al arribar a la escena del crimen se encontró con «una familia totalmente devastada por un hecho de sangre» y que el deceso de la mujer baleada fue «prácticamente instantáneo».
Según el instructor judicial, el agresor utilizó una pistola marca Tala calibre. 22 que fue secuestrada en poder del acusado.