La víctima se encontraba internado en el hospital Ramos Mejía. El crimen ocurrió el pasado 31 de diciembre mientras el hombre recolectaba cartones. La oficial quedó detenida
Un cartonero que había sido baleado el 31 de diciembre último luego que una oficial de la Policía de la Ciudad le quiso disparar a un ladrón que le había sustraído el celular mientras manejaba su auto particular, en el barrio porteño de Constitución, murió en las últimas horas, informaron hoy fuentes de la investigación.
Se trata de Pablo Pereyra, quien permanecía internado en el hospital Ramos Mejía y falleció a raíz de las lesiones sufridas en el hecho mencionado.
Fuentes de la investigación informaron a Télam que el juez en lo Criminal y Correccional Nacional 4, Martín Yadarola, recaratuló la causa como «homicidio agravado» y la oficial, cuya identidad no fue dada a conocer, seguirá detenida.
El crimen ocurrió el 31 de diciembre último alrededor de las 13, en la esquina de las calles Constitución y Presidente Luis Sáenz Peña, en el sur de la Ciudad de Buenos Aires.
La oficial de fuerza porteña circulaba uniformada a bordo de su auto particular con la ventanilla baja y en ese momento un delincuente le arrebató su teléfono celular y escapó a la carrera.
A raíz de ello, la policía descendió del vehículo, extrajo su arma reglamentaria y comenzó a dispararle al asaltante, según también quedó registrado en cámaras de seguridad ubicadas en la zona.
De acuerdo a las fuentes, uno de los disparos impactó en el cuerpo de Pereyra, mientras recolectaba cartones en la otra esquina, en Constitución y San José.
El hombre cayó al suelo gravemente herido y luego fue trasladado al hospital, donde quedó internado hasta finalmente falleció,
Por su parte, el juez Yadarola dispuso que, al estar involucrada una oficial de la Policía de la Ciudad, la pesquisa sea llevada adelante por la División Investigación de Homicidios de la Policía Federal Argentina (PFA).
De esta manera, los detectives de la PFA detuvieron durante un allanamiento en su vivienda del conurbano bonaerense a la acusada, quien había solicitado vacaciones el 1 de enero, horas después de balear al cartonero.
Asimismo, también fueron allanadas la casa de la hermana de la policía; el Anexo de la Comisaría Vecinal 1 C, donde prestaba servicio; y la sede de la mencionada dependencia.