Coincidieron en que la existencia de estas instalaciones "es una desgracia para Estados Unidos y la comunidad internacional en su conjunto", y señalaron que "debería haberse cerrado hace mucho tiempo"
La Organización de las Naciones Unidas (ONU) y Amnistía Internacional (AI) instaron este lunes al presidente electo de Estados Unidos, Joe Biden, a cerrar de forma «inmediata» el centro de detención de la base militar de la bahía cubana de Guantánamo, famosa por las violaciones a los derechos humanos que se cometieron allí y por mantener sin debido procesos a decenas de presos.
En un comunicado, un grupo de expertos de la ONU lamentó que «Guantánamo sea un lugar de arbitrariedad y abusos, de torturas y malos tratos» y alertaron que «es en este centro donde las leyes quedan suspendidas y la Justicia es rechazada».
El grupo de relatores especiales, un cargo independiente que reporta a la Consejo de Derechos Humanos de la ONU, agregó que «los presos que se encuentran en Guantánamo corren el peligro de ver su salud física y mental gravemente deteriorada» a medida que sufren «condiciones crueles e inhumanas» de encarcelamiento.
Para estos expertos de la ONU, la situación de los reclusos se ha deteriorado significativamente a raíz de la pandemia de coronavirus, que «exacerba sus vulnerabilidades en materia sanitaria».
«La existencia de estas instalaciones es una desgracia para Estados Unidos y la comunidad internacional en su conjunto», sentenció la organización, que insistió en que Guantánamo «debería haberse cerrado hace mucho tiempo».
En 2003 había en el centro 700 presos y según datos de la ONU, 19 años después hay unos 40 detenidos, si bien solo nueve han sido condenados o imputados por la comisión de delitos.
«No debemos olvidar que estos detenidos, que han sido víctimas de torturas y traumas, permanecen en un limbo legal al margen del sistema judicial de Estados Unidos», denunciaron los especialistas.
En ese sentido, reclamaron a las autoridades estadounidenses que «lleven ante la Justicia a los individuos que permanecen en Guantánamo o, de forma alternativa, que los pongan en libertad o los deporten a sus países de origen respetando el principio de no devolución».
«Con el nuevo Gobierno a punto de jurar el cargo y a medida que nos acercamos al 20º aniversario del 11-S, Guantánamo debe ser cerrado para siempre», concluyeron.
En la misma línea se expidió AI en un nuevo informe que denunció las violaciones de derechos humanos que se mantienen en ese centro de detención, en el marco del vigésimo año de las detenciones y a días de la llegada de un nuevo presidente a la Casa Blanca.
El informe, recogido por la agencia de noticias Europa Press, documentó violaciones de derechos humanos cometidas contra las personas recluidas en el campo, «donde las víctimas de tortura permanecen recluidas indefinidamente sin asistencia médica adecuada y sin un juicio con las debidas garantías».
“No se trata sólo de las 40 personas que aún están recluidas, sino también de los crímenes de derecho internacional cometidos en estos 19 años y la permanente ausencia de rendición de cuentas por tales crímenes. Tiene que ver también con el futuro, ya que este año se cumple el 20 aniversario de los atentados del 11-S y la lucha por una justicia duradera”, sostuvo Daphne Eviatar, directora del Programa de Seguridad con Derechos Humanos de Amnistía Internacional Estados Unidos.
En su informe, la ONG instó a abordar este asunto con renovada urgencia y un genuino compromiso con la verdad, la rendición de cuentas y la reparación, así como el reconocimiento de que no debe permitirse que continúen las detenciones indefinidas en Guantánamo.