"Si todo eso se resuelve, Assange, como cualquier otro australiano, podría volver a casa si quisiera. Dependería de él cuando todos estos procedimientos terminen", aseguró el primer ministro de Australia, Scott Morrison
El primer ministro de Australia, Scott Morrison, aseguró hoy que el fundador de WikiLeaks, Julian Assange, será «libre de volver» al país si las autoridades británicas retiran todos los cargos que pesan en su contra.
Las declaraciones del premier llegan un día después de que una jueza británica descartara la extradición del periodista a Estados Unidos, donde está acusado de espionaje con cargos que podrían costarle hasta 175 años de cárcel.
La jueza Vanessa Baraitser rechazó los argumentos de la defensa, sobre todo de que se trata de una causa política, pero entendió que había riesgo de suicidio debido a la depresión que tiene Assange tras siete años de encierro en la embajada de Ecuador en Londres y tres en cárceles británicas.
«Si todo eso se resuelve, Assange, como cualquier otro australiano, podría volver a casa si quisiera. Dependería de él cuando todos estos procedimientos terminen», aseguró Morrison en una entrevista radiofónica recogida por la agencia de noticias Europa Press.
Assange, es juzgado por supuesta conspiración con la militar Chelsea Manning por haber filtrado en 2010 y 2011 a decenas de medios de todo el mundo documentos secretos estadounidenses de las guerras de Irak y Afganistán y de la cárcel de Guantánamo.
El fundador de WikiLeaks permanece en una prisión de Londres a la espera de que se examine mañana su posible excarcelación.
El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, ofreció ayer asilo político a Assange, al tiempo que pidió para él un indulto por parte del mandatario estadounidense, Donald Trump, que termina su mandato en dos semanas.
Manning, por su parte, fue condenada a 35 años de prisión pero el 17 de enero de 2017, tras siete años de encierro, fue liberada tras recibir un indulto del entonces presidente Barack Obama.