El referente de la Concejalía Popular de Rosario desglosó lo que fue el 2020 para los inquilinos y advirtió que aún "hay una morosidad muy alta" en Rosario
Finalmente el 2020 quedó atrás. Un año en el que el impacto económico de la pandemia alcanzó a prácticamente todos los sectores de la sociedad, entre ellos al de los argentinos y las argentinas que mes a mes pagan un alquiler. Sin embargo, también hubo un hecho de gran relevancia para los inquilinos durante el año pasado, que fue la sanción de la nueva Ley de Alquileres. En ese contexto, CLG dialogó con Nire Roldán, referente de la Concejalía Popular de Rosario, quien hizo un balance del 2020 y habló sobre los objetivos para este nuevo año.
«En el 2020 los inquilinos tuvimos un hecho trascendente que fue la sanción de la nueva Ley Nacional de Alquileres. Eso generó un cambio importantísimo en la República Argentina, hace más de 30 años que peleábamos por ello y hoy conseguimos que muchos derechos estén garantizados por ley. Desde el 1 de julio del 2020 tenemos esa posibilidad», comenzó. Y agregó: «También tuvimos la sanción de los decretos de necesidad y urgencia en el marco de la pandemia que generaron una defensa muy importante a millones de inquilinos de todo el país».
«Eso no quiere decir que la vida de todos los días de los inquilinos se haya solucionado, sabemos que hay un nivel de endeudamiento altísimo, la crisis de la pandemia generó una imposibilidad de pago de muchísimos inquilinos que tuvieron que pactar un pago de 3 o 6 cuotas o directamente no pudieron pagar. Están muy atados a la necesidad de hoy pagar dos o tres cuotas de ese valor de alquiler, que en el mínimo de los casos son 30.000 o 40.000 pesos», continuó.
En ese sentido, Roldán insistió que la situación actual de los inquilinos argentinos está lejos de ser buena y pidió por la ayuda estatal: «Sabemos que hay millones de inquilinos en el país que tienen ese problema y es un problema que sin dudas tiene que resolver el Estado Nacional mediante alguna modalidad que le dé un apoyo a todos los inquilinos».
Además, se refirió al nivel de morosidad que actualmente existe: «Se dice que el nivel de endeudamiento es muy alto, sabemos que de distintas maneras hay una morosidad que va del 20 al 40% según el caso y el lugar. En Rosario podemos decir que hay una morosidad muy alta, entendemos que hace falta se prorrogue el DNU que vence el 1 de febrero, que exista un apartado especial dedicado a atender la deuda de los inquilinos. El agua aumentó en un porcentaje muy importante, ¿cómo hace un inquilino para pagar ese monto si no puede pagar el alquiler, si perdió su puesto de trabajo, si cobraba un IFE?».
En ese marco, pidió la implementación del Alquiler Social: «Para resolver ese problema hace falta una atención muy detallada y entendemos que para eso hay que poner en marcha el Programa Nacional de Alquiler Social, que es uno de los triunfos importantísimos que tuvimos en el marco de la Ley de Alquileres, que todavía está sujeto a reglamentación. Con la ex ministra Bielsa habíamos llegado a un acuerdo y en noviembre lo íbamos a poner en marcha, ahora asumió el nuevo ministro y lo estamos dialogando, es probable que en el 2021 se ponga en marcha».
Haciendo un balance sobre el año que pasó, Roldán expresó: «El 2020 fue positivo para los inquilinos en el marco de ensanchamiento de derechos, pero por supuesto que no fue positivo con respecto a lo que nos sucedió a todos los inquilinos a nivel nacional: estamos más endeudados, estamos con las mismas trabas que antes porque la especulación inmobiliaria no va a desaparecer de la noche a la mañana».
Sobre la realidad que enfrentan los inquilinos al momento de lidiar con las inmobiliarias, señaló: «Los alquileres hoy están congelados y existe un indicador que al año, recién el 1 de julio del 2021, deben empezar a aumentar. Sin embargo, todos sabemos que cuando vence un contrato presionan con aumentos de 30, 40 o 50%. Son abusos. Hemos desarrollado acuerdos con el Colegio de Corredores Inmobiliarios que se llama Protocolo Gran Rosario, para pactar que los aumentos no superen el 15 y el 20%, sin embargo sabemos que muchos piden más».
Con respecto al panorama de este 2021, indicó: «El reclamo es la puesta en marcha de un registro de contratos de alquileres formales e informales, la puesta en marcha del Programa Nacional de Alquiler Social para asistir a todos los inquilinos que tengan problemas, la puesta en marcha de un programa que atienda el endeudamiento y, de una buena vez por todas, que podamos prorrogar el DNU por un período de 180 días. En el 2021 creo que los inquilinos vamos a consolidar nuestros derechos, es un año muy fuerte que tenemos por delante».