La ministra de Gobierno bonaerense expresó su disconformidad con la resolución de la justicia que determinó el retorno del ex vicepresidente a la cárcel para cumplir con la pena
La ministra de Gobierno bonaerense, María Teresa García, manifestó este viernes estar «indignada» con la situación que está atravesando el ex vicepresidente Amado Boudou, a quien se le revocó la prisión domiciliaria en el marco de la denominada causa Ciccone, y advirtió que ese movimiento judicial «es un claro mensaje de sometimiento a la dirigencia política en general».
«Sería una vergüenza, un bochorno para este país, que Boudou vuelva a prisión. Hay que tener valentía en este tema, ningún dirigente se puede esconder debajo de una baldosa. No podemos guardar silencio y tener miedo», afirmó la ministra.
Anoche, el juez de Ejecución Penal Daniel Obligado ordenó que el ex vicepresidente Amado Boudou, condenado por el Caso Ciccone, vuelva a la cárcel para cumplir con la pena, al revocar la prisión domiciliaria que le había otorgado, pero la defensa apelará la medida ante la Cámara Federal de Casación Penal, por lo que ese retorno no se produciría de manera inmediata.
«La verdad es que estoy indignada con lo que pasa con (Amado) Boudou y creo que esto es un mensaje de sometimiento a la dirigencia política en general», sostuvo la funcionaria de la provincia de Buenos Aires.
En declaraciones a El Destape Radio, García opinó que «el lawfare es una metodología y una ideología de querer hacer claudicar a la dirigencia política» y denunció que «los movimientos judiciales de lo de (Amado) Boudou son un mensaje de sometimiento a la dirigencia política».
La decisión del juez Obligado hizo lugar al pedido de los fiscales Marcelo Colombo y Guillermina García Padín, quienes pidieron el regreso a la cárcel de Boudou, cuya condena a cinco años y medio de cárcel fue confirmada semanas atrás por la Corte Suprema de Justicia.