Los legisladores adelantaron su posición, al considerar que "sigue perjudicando a los jubilados y pensionados"
El proyecto que establece una nueva fórmula de movilidad jubilatoria ya cuenta con media sanción en la Cámara de Senadores. Sin embargo, no tendrá un paso fácil en la de Diputados. Cinco legisladores del interbloque Federal, integrado por socialistas y lavagnistas, adelantaron que no apoyarán la iniciativa del oficialismo. Afirmaron que a pesar de las reformas que se incorporaron, “sigue perjudicando a los jubilados y pensionados”.
Asimismo, el bloque integrado por Graciela Camaño, Jorge Sarghini, Alejandro Rodríguez, Enrique Estévez y Luis Contigiani consideró que el proyecto “no resuelve el problema del achatamiento y de la pérdida de poder adquisitivo (de los jubilados)”.
Los legisladores emitieron un comunicado adelantando su postura, antes del tratamiento de la iniciativa, que comenzará a debatirse el lunes próximo en el plenario de las comisiones de Presupuesto y de Previsión Social. El oficialismo, que no tiene mayoría propia, prevé aprobarlo en el recinto el 30 de este mes. Para lograrlo, necesitará que lo apoyen al menos doce aliados. El principal bloque opositor, Juntos por el Cambio, ya anticipó su rechazo.
En el comunicado, los cinco diputados del interbloque Federal no solo cuestionaron la política previsional del Gobierno; también criticaron la fórmula de movilidad jubilatoria que se aplicó durante los últimos dos años de gobierno del ex presidente Mauricio Macri, que actualizaba los haberes según la inflación. Al asumir su mandato, Fernández decidió suspender aquella fórmula con el compromiso de que enviaría al Congreso una nueva propuesta antes de fin de año.
“Los jubilados no pueden seguir siendo la variable de ajuste de los errores en que incurren los sucesivos gobiernos. El gobierno de Cambiemos los perjudicó seriamente al cambiarles el sistema, con una fórmula de movilidad jubilatoria solo defendible en una economía que fracasa: se estanca o decrece con alta inflación. También fueron perjudicados por la dolarización de las tarifas y su duro impacto en el costo de vida”, analizaron sobre la fórmula del gobierno anterior.
Respecto a la fórmula en discusión, los legisladores advirtieron que sigue sin resolver el problema de fondo: “el 50% de argentinos que trabajan en la informalidad y, por lo tanto, no aportan al sistema previsional”. En este sentido, añadieron que “es indispensable aumentar la cantidad de aportantes, lo que se puede lograr incorporando al 50% de los trabajadores privados que hoy están en la informalidad y creando trabajo. Ese es el gran mandato social que debe cumplir el Gobierno”.
La nueva fórmula, aprobada la semana pasada por el Senado es similar a la que rigió durante el gobierno de Cristina Fernández de Kirchner. Se aplicará de manera trimestral (en la versión original del Poder Ejecutivo era semestral) y excluirá a la inflación como factor para determinar la actualización de las jubilaciones. Estará compuesta en partes iguales por la recaudación de los impuestos destinados a financiar a la Anses y por el indicador que arroje el resultado más alto entre la Remuneración Imponible Promedio de los Trabajadores Estables (Ripte) y el índice de evolución salarial que elabora el Indec. Además, el kirchnerismo en el Senado decidió incorporar el 5% de aumento a los jubilados otorgado por el gobierno en diciembre, que en el proyecto de Economía era tomado a cuenta de la primera actualización.