El Canalla cayó 4-2 con el Taladro. Vecchio y Rinaudo anotaron para los del Kily; Fontana, Bordagaray, Galoppo y Cuero marcaron para la visita
Una noche para el olvido. El Central del Kily González mostró su peor cara desde que arrancó la Copa de la Liga Profesional. En el Gigante de Arroyito fue goleado 4-2 ante el duro Banfield de Javier Sanguinetti, que con este triunfo sigue siendo puntero e invicto con puntaje ideal de la zona 3.
Frenético fue el arranque. Con Central apretando bien arriba y teniendo la primera chance en los pies de Ferreyra: el derechazo rozó en un defensor y el balón salió besando el palo derecho de Arboleda.
Banfield no se quedó atrás y tuvo dos clarísimas: primero con un furibundo remate de Payero que reventó el travesaño de Miño y en el rebote Cuero disparó apenas desviado.
A los 15 el Canalla volvió a llegar. Esta vez con un tiro envenenado de Vecchio que rozó el poste del arco visitante.
Y a los 23 se infló la red. Y fue la del arco de Banfield. Central volvió a apostar a la banda derecha, Torrent llegó al fondo y envió un centro al corazón del área, por donde ingresó Vecchio para poner el 1-0.
Muy poco le duró la alegría al equipo del Kily. Tres minutos más tarde, Banfield marcó y llegó al empate. Cuero desbordó con facilidad al pibe Blanco y mandó un centro al área chica, Miño dudó y no salió; Novaretti miró y el pibe Fontana sólo tuvo que poner la cabeza para el 1-1. Justo.
El Canalla buscó y estuvo cerca con un cabezazo de Vecchio y un zurdazo de López Pissano, pero se volvió a equivocar en defensa y sacó del medio otra vez.
A los 43, Bordagaray aprovechó un quedo entre Novaretti y Torrent y ante la pasividad de Miño (dudó otra vez entre salir o quedarse) estampó el 2-1, haciendo cumplir la ley del ex en el Gigante.
Así, se fueron al descanso. Bronca para los canallas, alegría para la visita.
Foto: Pool Argra
El Kily metió mano en el arranque del complemento. Mandó a la cancha a Gino Infantino y a Fabián Rinaudo por Ferreyra y Ojeda.
El Canalla no tuvo conexión entre líneas y le costó llegar en el comienzo. Es que faltaba fluidez de juego para que el balón le llegue limpio a Vecchio y a Gamba, quien tuvo poca participación.
Desorientado, sin ideas y perdido. Así deambulaba Central por el césped del Gigante. Y ante cada ataque del Taladro maduraba otro gol. Se lo perdió de manera increíble Fontana, pero a los 20 volvió a inflar la red de Miño. Centro tras un córner, nadie marcó a Galoppo y el marcado central puso el 3-1. Merecido.
Banfield siguió haciendo méritos para aumentar la goleada y Central continuó haciendo méritos en defensa para sufrir más goles.
A los 32, Cuero, la gran figura de la noche, dejó en ridículo a Rinaudo, quedó cara a cara con Miño y ante el achique tibio del arquero canalla definió con simpleza: 4-1. Y baile.
Hubo poco tiempo para más. Sólo para el golazo de Rinaudo desde 25 metros y para que Banfield toque el balón y siga poniendo en aprietos a un Miño que tuvo como el resto de sus defensores una noche negra.
Central decepcionó y dejó mucha preocupación. Se muestre endeble en defensa y de arriba en adelante si Vecchio no aparece le cuesta horrores generar peligro. Es tiempo de pensar y dar vuelta la página. Ya no hay margen para un nuevo error si quiere ser protagonista. Aunque si sigue jugando como este noche la empresa será casi una misión imposible.
Formaciones
Central: Miño; Fernando Torrent, Diego Novaretti, Jonathan Bottinelli y Lautaro Blanco; Rodrigo Villagra y Emmanuel Ojeda; Joel López Pissano, Emiliano Vecchio y Luciano Ferreyra; Lucas Gamba.
Banfield: Mauricio Arboleda; Emanuel Coronel, Alexis Maldonado, Luciano Lollo y Claudio Bravo; Jorge Rodríguez, Giuliano Galoppo, Martín Payero y Fabián Bordagaray, Mauricio Cuero y Agustín Fontana.