El fiscal Eduardo Taiano no puede analizar una pericia ya realizada por Gendarmería ya que el técnico informático pide que esa tarea la lleve adelante el juez federal Julián Ercolini
La Corte Suprema de Justicia tiene para resolver un planteo del técnico informático Diego Lagomarsino que se opone a que el fiscal del caso analice un peritaje ya realizado sobre al menos 200 dispositivos electrónicos secuestrados tanto a él como a los custodios del fiscal Alberto Nisman, quien apareció muerto en su departamento en enero de 2015.
La pericia ya realizada por la Gendarmería aún no pudo ser analizada por el fiscal Eduardo Taiano por el planteo de Lagomarsino, quien reclama que esa tarea la lleve adelante el juez federal Julián Ercolini.
Se trata de 200 equipos, entre los cuales hay teléfonos, computadoras, discos externos, pen drives y otros dispositivos que fueron secuestrados de distintos domicilios tanto de Lagomarsino como de los custodios también investigados en la causa.
El peritaje, realizado en 2017 por Gendarmería y del cual participaron peritos de parte, fue una tarea de dos años para extraer la información de todos esos dispositivos, y aún el fiscal no pudo analizarlos por el planteo de Lagomarsino.
La defensa del técnico informático cuestionó que el fiscal Taiano sea quien analice el peritaje invocando el derecho de defensa y al considerar que la ejecución de la medida en cuestión se trata de una facultad expresamente reservada al juez de la causa.
Hasta el momento, el planteo fue rechazado por el juez Ercolini, por la Cámara Federal y hace meses por la Cámara Federal de Casación Penal, tras lo cual la defensa llevó el caso hasta la Corte Suprema de Justicia donde se terminará de definir.