"El próximo Consejo Económico y Social se pondrá en marcha como ámbito permanente para consagrar los mecanismos de diálogo, para derrotar a la dictadura de la imposibilidad", agregó el secretario de Asuntos Estratégicos de la Presidencia
El secretario de Asuntos Estratégicos de la Presidencia, Gustavo Beliz, destacó hoy la próxima constitución del Consejo Económico y Social «como el ámbito permanente del diálogo» en la Argentina, y advirtió sobre la «judicialización de la política» como método para destruir al otro.
«El próximo Consejo Económico y Social se pondrá en marcha como ámbito permanente para consagrar los mecanismos de diálogo, para derrotar a la dictadura de la imposibilidad», afirmó Beliz esta mañana durante un seminario sobre Desarrollo Humano organizado por la UCA, Cáritas, y la Comisión de Justicia y Paz.
El funcionario, que participó del panel «El diálogo como camino de construcción de la fraternidad y la amistad social», señaló también que «el diálogo no es un aturdimiento entre los que ya tienen voz sino darle la oportunidad de darles voz a los que no la tienen».
En ese marco, destacó que es «muy importante el derrame de arriba hacia abajo del ejemplo de los dirigentes», y consideró «la judicialización de la política» como «una trampa perversa, que busca eliminar a otro de a través de la judicialización».
En esa línea, marcó que en la Argentina «falte tierra, trabajo y techo es un enloquecimiento económico y moral, que tiene su raíz en el enloquecimiento dirigencial y político en sentido amplio».
Por eso, subrayó que la Argentina «tiene tierra de sobra, alimentación de sobra para todo el mundo, y está todo por hacer, por eso es tan relevante el diálogo como sanación».
Asimismo, llamó a «construir la hospitalidad en medio de un hospital de campaña, que es la Argentina de hoy, donde hay que atender todo al mismo tiempo, y donde parece que no hay espacio para detenerse a dialogar».
Destacó también «la Mesa contra el Hambre, como gran prioridad nacional, porque es una gran convocatoria a todos los sectores para superar una tragedia que vivimos en la Argentina».
El panel fue abierto por el titular de la Conferencia Episcopal Argentina, monseñor Oscar Ojea, quien puntualizó que «el pacto social debe ser cultural, y el acuerdo debe apoyarse en el pueblo, en lo que éste va elaborando a través de sus relaciones, no debe ser un acuerdo de una élite de economistas o académicos».
Ojea se preguntó: «Qué modo tenemos nosotros de conjugar las diferencias en un mundo donde ya no se debaten ideas, en el debate político, por ejemplo, sino que se intenta destruir al adversario?».
El prelado dijo, entonces, que frente a esta situación «hay que buscar un profundo cambio basado en la cultura del encuentro, que necesita apoyarse en un consenso, una base común, que debe estar afirmado en valores, y el Papa nos dice que el valor común que podemos encontrar es el valor de la dignidad suprema de la persona humana».
Ojea agregó que «la globalización» genera cercanía «pero no nos hace hermanos» y consideró que, incluso, «ha ido diluyendo en cierto sentido la identidad cultural de muchos pueblos, en función de una unidad que es más bien abstracta» que genera aislamiento.
A su turno, Ariel Eichbaum, presidente de la AMIA, convocó a reeditar la Mesa del Diálogo de los Argentinos «de 2001-2002, para pasar la solidaridad de la expresión a la acción» y destacó la «acción social reparadora» de cada institución de fe.
Aníbal Bachir Bakir, presidente de CIRA (Centro Islámico de la República Argentina), apuntó a «buscar los valores en común» que tienen las distintas instituciones que, dijo, «son muchos», y abogó por más encuentros interreligiosos.
Jorge Knoblovits, presidente de DAIA, resaltó que las «instituciones religiosas deben instar a que el poder político pueda escuchar lo que la sociedad civil le pide» y dijo que «la construcción es con los otros, y el diálogo es determinante, para escucharnos a nosotros, y para escuchar al otro».
En esa línea, Guillermo Fernández, de Aciera Social (iglesias evangélicas), expresó su deseo de que «los que tienen que tomar las decisiones escuchen a aquellos que tienen la capacidad de traer una palabra para el bien de todos.
«Cuando todos trabajemos por la salvación del conjunto, cada uno podrá alcanzar su destino», completó.
La primera jornada del seminario «Hacia una Argentina con desarrollo integral. Tierra, Techo y Trabajo en la perspectiva de la fraternidad y la amistad social», se desarrolló esta mañana, en tanto la segunda parte está prevista para el próximo 25, con la participación de referentes políticos y religiosos de distintos sectores.
Frente a la reciente carta encíclica Fratelli Tutti del papa Francisco sobre la fraternidad y la amistad social, se procura colaborar en la construcción de alternativas prioritarias para la formulación de políticas basadas en el compromiso con la cultura del encuentro y el diálogo social en la generación de consensos para el bien común, se indicó desde la organización del evento.