Federico Bernal, a cargo del Ente Nacional Regulador del Gas, reveló que fue un pedido expreso del presidente Alberto Fernández
El interventor del Ente Nacional Regulador del Gas (Enargas), Federico Bernal, destacó que el presidente Alberto Fernández le encargó «normalizar el sector y lograr tarifas justas y razonables», y subrayó que lo que el Jefe de Estado «entiende por servicios públicos esenciales está en las antípodas» de su antecesor Mauricio Macri.
En dialogó exclusivo con la agencia Telam, Bernal subrayó que «sin energía barata; sin servicios públicos asequibles y accesibles no hay desarrollo, industrialización ni mercado interno».
¿Qué va a pasar con las tarifas de gas después del 31 de diciembre?
«El mantenimiento tarifario termina el 18 de diciembre. Lo que pase con la tarifa a partir del 31 de diciembre será lo que el Ejecutivo haya decidido para después del 19 de diciembre. Dicho de otra manera, el 31 de diciembre no es una fecha significativa en materia tarifaria. Lo único que tiene de especial es ser el último día de un año muy complejo y que sin duda alguna superaremos».
¿Entonces, qué pasará con la tarifa a partir del 19 de diciembre?
«Lo que resuelva el Presidente de la Nación de acuerdo con los resultados de las auditorías y revisiones encaradas por las intervenciones de los entes reguladores. Y todo esto, considerando lo que el Presidente entiende por servicios públicos esenciales, por supuesto en las antípodas de lo que entiende Mauricio Macri. Entonces, en base a las instrucciones que recibamos, conforme a la ley, avanzaremos en materia tarifaria para 2021, 2022 y los años subsiguientes. En el caso de decidirse por tarifas de transición, las mismas no podrán entrar en vigencia el 19 de diciembre por una simple cuestión de tiempos, ya que su elaboración, incluyendo lo relativo a la convocatoria a audiencias públicas y sus respectivos plazos, insumirá varios meses».
¿Llegó a alguna conclusión en la auditoría que le encomendó el Presidente?
«Estamos todavía en pleno proceso de auditoría. Culminaremos en las próximas semanas. Las conclusiones todavía son preliminares y por ello prefiero no adelantar nada en orden a no prejuzgar. No obstante, estamos encontrando vicios comunes a todas las licenciatarias, tal y como comunicamos oficialmente a mediados de agosto».
¿Qué dicen las empresas?
«Hemos armado mesas de trabajo con transportistas y distribuidoras. Estamos abiertos a sus observaciones y aportes. Las invitamos a trabajar conjuntamente para que la nueva tarifa, si es que así se decide, no adolezca de los vicios, problemas ni limitaciones de la tarifa 2016/17. Las empresas tienen que tener su rentabilidad justa y razonable, y el servicio público debe poder pagarse y proseguir un ritmo de expansión compatible con la gasificación del país que todavía carece de acceso al gas por redes, y hacerlo en tiempo y forma. El Presidente nos encargó normalizar el sector y lograr tarifas justas, razonables y asequibles. Que promuevan el desarrollo económico y la calidad de vida de la población. Que otorguen rentabilidad a las empresas e ingresos tales que puedan afrontar sus costos y pagar el gas que contratan a las productoras, cosa que paradójicamente no han podido hacer con Macri a pesar de la tarifa de (el ex ministro de Energía, Juan José) Aranguren. En este camino estamos, trabajando codo a codo con el secretario de Energía, Darío Martínez, y el ministro de Economía, Martín Guzmán».
¿Es posible revertir el estado de situación que dejó el macrismo?
«Es lo que nos pidió el Presidente. Y así se hará. Sin energía barata; sin servicios públicos asequibles y accesibles no hay desarrollo, industrialización ni mercado interno. Incluso el abaratamiento del precio del gas es indispensable para viabilizar cualquier proyecto de exportación. La tarifa de Macri adolece de severos inconvenientes; de allí la declaración de la Emergencia Energética y Tarifaria. Basta ver a comienzos de 2018, y que prosiguieron hasta el final del mandato de Macri, los crecientes y preocupantes desencuentros entre distribuidoras y productoras, con una morosidad en ascenso, inversiones comprometidas muy difíciles de cumplir y una actualización de la tarifa incompatible con la Argentina y el estado de situación calamitoso a nivel socioeconómico que padecía la sociedad. De hecho, fue durante el gobierno de Macri que se estableció el congelamiento. Y recordemos, en un mar de cuotas, diferimientos, bonificaciones, endeudamiento entre productoras y distribuidoras».
¿Cuáles son las expectativas con el Plan Gas?
«Es el primer paso para reconstruir el sector, y no solamente por la pandemia, sino por la herencia macrista. De acuerdo con los balances de YPF, su producción gasífera se desplomó un 10,1% entre 2015 y 2019. La producción petrolera casi igual: 9,4%. YPF se vio obligada a cerrar pozos, lo cual comenzó a hacer en 2018, agudizando la tendencia a partir de 2019, afectándose fuertemente la producción en áreas claves como Loma La Lata – Sierra Barrosa y El Orejano. Bueno, el Plan Gas debería revertir esta situación. A propósito de la debacle de YPF gracias a Macri, las declaraciones que hizo el Presidente cuando anunció el nuevo Plan Gas en Neuquén».