La oposición se quejó sobre falta de tiempo para estudiar las modificaciones y así el oficialismo postergó la decisión. El miércoles será la sesión donde se llevaría a cabo la votación
El oficialismo de la Cámara de Diputados pospuso hoy la firma del dictamen sobre el proyecto de Presupuesto 2021 tras quejas de la oposición sobre la falta de tiempo para estudiar las últimas modificaciones en la redacción, en tanto que la sesión para votar esta iniciativa se celebraría el próximo miércoles.
Así lo adelantó el presidente de la comisión de Presupuesto y Hacienda, Carlos Heller, quien aclaró que el oficialismo contaba con los votos suficientes para firmar dictamen este jueves, pero que voluntariamente se tomó la decisión de otorgar 24 horas más a través de un cuarto intermedio hasta el viernes a las 15:00, a fin de «dar la posibilidad de que todos tengan un poco más de tiempo para leer, analizar y en lo posible para acompañar».
El primero en formular sus reparos al «apuro» con que el oficialismo pretendía concluir el debate y pasar a la firma fue el diputado del PRO Luciano Laspina, quien advirtió sobre la incorporación de último momento de alrededor de 40 nuevos artículos que fueron informados al pleno de la comisión apenas unas horas antes del inicio de la reunión informativa.
«Hoy nos encontramos con un dictamen que plantea 40 nuevos artículos con una gran cantidad de temas, y modificaciones y agregados en temas impositivos, regulatorios que hace difícil avanzar hoy mismo, en tener una evaluación y una discusión rigurosa», señaló el santafesino de Juntos por el Cambio.
«Entiendo las demandas del Poder Ejecutivo y se van a incorporando hora a hora e intentando sumar guirnaldas y adornos a este gran arbolito de Navidad que es el Presupuesto. Nos ha sorprendido la cantidad e artículos nuevos y la variedad de los temas que abarca», advirtió.
La queja fue luego reforzada por el radical Luis Pastori, quien pidió tiempo hasta el martes, lo cual fue denegado.
El misionero advirtió que la mayoría de los nuevos 40 artículos que se proponen «nunca estuvieron en el debate durante este tiempo que lleva la comisión discutiendo el presupuesto desde el 15 de septiembre».
«No nos pueden pedir que analicemos con responsabilidad y seriedad esta catarata de nuevos artículos», insistió.
Sobre el final, Heller explicó que el «apuro» que la oposición le atribuye al oficialismo tiene que ver con que «el país necesita cerrar su discusión del Presupuesto antes de que se inicie la negociación con el Fondo Monetario Internacional».
«(La aprobación sería) la demostración de que este es el presupuesto elaborado por los argentinos a través de su representación institucional y que no forma parte de una materia negociable con el FMI», conjeturó el economista del Frente de Todos, quien anticipó que la delegación del FMI vendría a la Argentina en los primeros días de noviembre.
Entre los cambios efectuados al proyecto oficial, Heller mencionó la inclusión de un último párrafo en el artículo 87 que establece un régimen especial de créditos para distribuidores de energía eléctrica provinciales que al 30 de septiembre no tengan deuda o que en todo caso dicha deuda se mantenga en «valores razonables».
Por otra parte, la totalidad de la recaudación del Fondo Especial del Tabaco será depositado en una cuenta especial y esos recursos «serán transferidos mensualmente y en forma automática» por el Banco Nación a las provincias productoras de tabaco.
En tanto, se incorpora el artículo 130 que autoriza al jefe de Gabinete de ministros a «efectuar las gestiones presupuestarias necesarias» para asignar recursos al proceso de reequipamiento de las Fuerzas Armadas a través del Fondo Nacional de Desarrollo Productivo (Fondep).
«Somos conscientes de que no hemos entendido todo lo que se pidió pero también pido que sean conscientes del enorme esfuerzo para atender todo lo que atendemos», afirmó Heller al comenzar el debate de comisión.
Quien no quedó del todo conforme fue Paulo Cassinerio, de Córdoba Federal, quien juzgó insuficiente el aumento de los subsidios para el transporte de pasajeros en el interior de 13.500 a 20.500 millones, y consideró el monto debería crecer unos 10 millones de pesos más para poder garantizar el servicio.
«Vemos insuficiente, inequitativo y antifederal del criterio de reparto de esos recursos que la Nación pone a disposición.
Hay un riesgo enorme en la continuidad del servicio de transporte en el interior del país. Se van a volver a desencadenar severos conflictos como el de la Ciudad de Córdoba, donde tuvimos 20 días de paro», alertó, y comparó las tarifas en el Amba respecto de las que se cobran (a valores más altos) en ciudades importantes del interior.
Al respecto, advirtió que sobre el monto de subsidios otorgado este año (de 18.000 millones), el incremento previsto para el año que viene será de sólo 18%, lo cual implica un recorte real de 11 puntos si se toma la inflación proyectada del 29%.