Los datos se desprenden de un informado presentado por el Instituto Nacional de Derechos Humanos (INDH)
Más de 3.000 chilenos fueron víctimas de violaciones de derechos humanos durante el estallido social del año pasado y más de 2.500 presentaron querellas contra agentes de seguridad del Estado, según el informe que presentó este viernes el Instituto Nacional de Derechos Humanos (INDH).
La presentación fue encabezada por el director del organismo, Sergio Micco, quien destacó que el objetivo es dar a conocer “avances en materia de verdad, justicia, reparación y garantías para que no se repitan” los hechos.
Micco informó que se presentaron 2.520 querellas contra organismos de seguridad por violaciones a derechos humanos en todo el país.
Destacó que la gran mayoría (2.340) fueron dirigidas contra efectivos de Carabineros, 97 contra militares del Ejército, 34 contra integrantes de la Policía de Investigaciones (PDI) y 49 a “otros”.
El INDH informó que sólo se formalizaron 31 causas y se imputaron a 72 involucrados en violaciones a derechos fundamentales.
Al ser la Región Metropolitana el principal centro de protestas en todo Chile, es también el lugar del país donde se presentaron más querellas con 986, le sigue la región del Biobío con 248 y la tercera región con más querellas fue la región de Los Ríos con 158.
Sobre las víctimas, el INDH reveló que durante las protestas hubo 3.023 víctimas de violación a derechos humanos, de los cuales 1.810 fueron hombres, 621 mujeres, 336 niños y adolescentes, 132 niñas y adolescentes y 124 los califican como “otros”.
Resaltaron la gran cantidad de personas que sufrieron un trauma ocular, que fueron 163, de las cuales 110 tuvieron algún tipo de lesión en el ojo y 32 personas presentaron pérdida de la visión por “trauma ocular irreversible”.
El INDH es una de las principales organizaciones que denuncia el accionar represivo de fuerzas de seguridad del Estado chileno desde el inicio de las manifestaciones sociales el 18 de octubre del 2019.
Al cumplirse el domingo un un año del estallido, el país vive nuevamente horas de tensión social y política.
Las protestas de octubre se dieron para reclamar mayores reivindicaciones económicas, políticas y sociales, las cuales pusieron en jaque el segundo Gobierno de Sebastián Piñera.
Al acercarse el 18 de octubre, el ministerio de Salud de Chile, anunció medidas para evitar el surgimiento de un eventual rebrote por coronavirus durante las marchas que tendrán lugar en la capital, Santiago y otras localidades.
El país también se prepara también para el 25 de octubre, fecha en la cual se celebrará un plebiscito donde se le consultará a los chilenos si quieren cambiar o no la actual Constitución, redactada en 1980 durante la dictadura cívico militar de Augusto Pinochet (1973-1990).