El dueño del Liverpool llevó novedades para reducir la cantidad de equipos y la formas de ascender y descender y desde Manchester United apoyaron la idea
El primer ministro del Reino Unido, Boris Johnson, se mostró hoy contrario al proyecto de reestructuración de la Premier League inglesa, porque le «resta confianza en la gobernanza del fútbol».
«Es exactamente este tipo de negociaciones entre bambalinas lo que resta confianza en la gobernanza del fútbol», afirmó en la jornada el portavoz oficial de Johnson, consignó un despacho de la agencia francesa AFP.
La iniciativa surgió de una propuesta elevada por Fenway, la empresa estadounidense dueña del Liverpool, y que tuvo una recepción favorable por parte del Manchester United.
La reforma pretende reducir la cantidad de equipos participantes de la Premier League inglesa a 18, además de suprimir la Copa de la Liga y la Supercopa (Community Shield).
Entre los cambios propuestos, se introduciría una nueva forma de determinar los ascensos y descensos, donde por ejemplo los dos últimos equipos del campeonato bajarían de categoría.
Además, el club que se clasifique en el 16º lugar jugaría un torneo con los equipos posicionados del tercer al quinto puesto de la segunda división inglesa (Championship), para permanecer en la divisional.
Los cambios propuestos le darían más poder a los equipos que integran los «Big 6» (Manchester United, Manchester City, Liverpool, Arsenal, Chelsea y Tottenham), junto a Everton, Southampton y West Ham, por ser los más antiguos del certamen.
La reforma los facultaría para asegurarse los votos necesarios para introducir reformas en la competición, con una mayoría de sólo 6 para aprobarlas.
En la actualidad, los 20 clubes que participan de la Premier League tienen derecho a voto y se necesita de una mayoría de 14 para realizar cambios.
De adoptarse la reforma propuesta, los clubes que integran la Premier League, pasarían a solventar con 326 millones de dólares a la Liga Inglesa de Fútbol (EFL).
Dicha suma servirá para auxiliar a los clubes de las tres divisionales inferiores del fútbol inglés, para que superen sus crisis financieras provocadas por la pandemia de Covid-19.