Crece la esperanza para que haya un cese de las hostilidades que comenzaron el 27 de septiembre en la región separatista de Nagorno Karabaj
Los ministros de Relaciones Exteriores de Armenia y Azerbaiyán viajaron este viernes a Moscú para iniciar las nuevas negociaciones de paz, en lo que es la primera esperanza para que haya un cese de las hostilidades que comenzaron el 27 de septiembre en la región separatista de Nagorno Karabaj.
El primer ministro armenio, Nikol Pashinian, afirmó que está «listo» para reanudar el proceso de paz con Azerbaiyán, aunque los violentos combates entre las partes persistieron hoy a la espera de la mediación impulsada por el presidente ruso, Vladimir Putin.
El mandatario, que ya se reunió con el presidente azerbaiyano, Ilham Aliyev, y con el primer ministro armenio «insta al cese de los combates por razones humanitarias, para poder intercambiar los cuerpos de los muertos y los prisioneros», según un comunicado del Kremlin.
Los cancilleres armenio y azerbaiyano, Zohrab Mnatsakanian y Ceyhun Bayramov, confirmaron hoy que viajan a Moscú, indicó a la agencia de noticias AFP la diplomacia rusa.
«Nos orientamos hacia una tregua esta noche o mañana, pero todo es aún frágil», dijo por su parte el Ejecutivo francés, tras conversaciones telefónicas del presidente Emmanuel Macron con Pashinian y Aliyev.
«Prepararemos la reanudación de las negociaciones en los próximos días, en el marco del Grupo de Minsk», añadió el Palacio de Eliseo en referencia al grupo de mediación que conforman Francia, Rusia y Estados Unidos.
Este grupo actúa como mediador en este conflicto desde los años 1990, cuando se produjo la primera guerra entre separatistas armenios y fuerzas azerbaiyanas tras la caída de la Unión Soviética, un conflicto que dejó 30.000 muertos.
Nagorno Karabaj se proclamó independiente de Azerbaiyán en 1991 y en 1994 se produjo el alto el fuego, aunque desde entonces hay conflictos esporádicos como el de 2016 o el que comenzó el 27 de septiembre último y que sigue hasta hoy.
Tras varios días de intensos enfrentamientos, un periodista de la agencia de noticias AFP dio cuenta de una noche más tranquila en la capital del territorio separatista, Stepanakert, en tanto que Azerbaiyán y Armenia indicaron que la situación en el frente sigue tensa.
«Los disparos de artillería continuaron en varios sectores de la línea del frente. El enemigo alcanzó zonas pobladas con cohetes y artillería», afirmó el centro de información del Gobierno armenio, que aseguró que el ejército separatista mantenía la situación bajo «control».
Por su parte, el Ministerio de Defensa de Azerbaiyán también informó de violentos combates en el frente y afirmó que había infligido varias derrotas al enemigo.
El balance de muertos por estos enfrentamientos ascendía a más de 400, incluyendo civiles, aunque es una cifra muy parcial ya que Azerbaiyán no anuncia sus pérdidas militares
En los últimos días, los combates se extendieron con bombardeos en zonas urbanas, y ambos bandos se acusan mutuamente de apuntar contra civiles.
Según las autoridades separatistas, la mitad de los 140.000 habitantes de Nagorno Karabaj tuvieron que dejar sus hogares a causa de los enfrentamientos.