Se realizó una ceremonia con 130 asistentes en Potsdam, a unos 25 kilómetros al sudoeste de Berlín. A pesar de los festejos, dos terceras partes de los alemanes creen que la reunificación sigue incompleta
Alemania conmemora este sábado el Día de la Unidad con una serie de actos marcados por las limitaciones impuestas ante la pandemia de coronavirus y con llamados de atención acerca de que a poco más de tres décadas de la caída del Muro de Berlín, la reunificación está lejos de ser un hecho.
La canciller, Angela Merkel; el presidente, Frank-Walter Steinmeier, y el veterano político y presidente del Parlamento, Wolfgang Schaeuble, participaron de una ceremonia oficial en la iglesia de San Pedro y San Pablo, en Potsdam, a unos 25 kilómetros al sudoeste de Berlín.
Al acto solo pudieron ingresar 130 asistentes, todos con barbijo, y en medio de un nutrido despliegue policial para contener posibles manifestaciones de protesta.
Merkel, primera canciller nacida en la antigua Alemania oriental, llamó a los ciudadanos del este y el oeste del país a continuar manteniendo la cohesión social, especialmente para afrontar la crisis derivada del coronavirus.
«Sabemos que hoy tenemos que volver a ser valientes, valientes para recorrer nuevos caminos frente a una pandemia, valientes para superar realmente las diferencias que subsisten entre el este y el oeste, pero también valientes para exigir y seguir trabajando por la cohesión de toda nuestra sociedad», declaró la mandataria poco antes antes de la ceremonia central en Potsdam.
La canciller reconoció el compromiso que tuvieron todos durante 1989 y 1990, cuando se dio una serie de cambios políticos y sociales que concluyeron en la adhesión de la antigua República Democrática Alemana (RDA) bajo la jurisdicción de la República Federal de Alemania (RFA), sobre el final de la Guerra Fría (1945-1991).
«Hoy podemos alegrarnos de poder celebrar el trigésimo aniversario de la unidad alemana en paz y libertad», destacó Merkel, citada por la agencia de noticias DPA.
«Se necesitó mucho coraje de las personas en la antigua RDA salieron a las calles, poniendo en marcha una revolución pacífica», manifestó. Merkel indicó que incluso los ciudadanos de la otrora RFA tuvieron también el valor de tomar el camino de la unidad del país, al igual que los socios de Alemania.
En vista del aumento de los conflictos en el mundo desde la reunificación, Merkel evaluó que seguirán «necesitando valor en el este y el oeste, en el norte y el sur, para continuar juntos por un camino bueno y pacífico».
El exlíder soviético Mijail Gorbachov envió sus felicitaciones por este día, al que consideró «parte de un gran aniversario internacional», y destacó que que se trató de un proceso «tenso, en el que cualquier paso mal medido podría haber llevado a una explosión».
Por su parte, el actual mandatario ruso, Vladimir Putin, hizo llegar un mensaje de felicitación en el que reafirmó la «disposición de Rusia al diálogo y la cooperación con los socios germanos sobre los temas de la agenda bilateral e internacional».
Pese a la algarabía por el aniversario, según recientes encuestas, dos terceras partes de los alemanes creen que la reunificación sigue incompleta, tres décadas después.
De hecho, la situación de los alemanes en la antigua Alemania del este es peor que sus compatriotas occidentales, por lo menos en términos económicos.
Así, en las zonas de la antigua RDA, ocho de cada 10 alemanes del este consideran que el proceso de reunificación todavía no culminó, por casi seis de cada 10 residentes en la antigua RFA que piden completar el proceso y lograr la completa unidad, según una encuesta de YouGov encargada por DPA.