Se trata de la piedra del collar que utilizaba "Kufa", según reconoció su madre. El hallazgo fue realizado por un perro adiestrado
Los investigadores del caso Facundo Astudillo Castro, el joven cuyo cadáver apareció el 15 de agosto pasado en la localidad bonaerense de General Daniel Cerri, determinaron que el geolocalizador de un patrullero secuestrado en el marco de la causa funcionaba normalmente y lo ubicó a unos 800 metros de donde fue hallado el cuerpo el pasado 8 de mayo, nueve días después de la desaparición, informaron hoy fuentes judiciales.
Para Cristina Castro, la madre de Facundo, el resultado de ese peritaje «complica más a la policía bonaerense» y se contrapone a lo que había dicho el ministro de Seguridad de la provincia de Buenos Aires, Sergio Berni, que había asegurado que el sistema AVL del móvil policial «fallaba» y que por eso lo ubicaba en proximidades del cangrejal de Daniel Cerri.
Se trata de un informe tecnológico que se realizó sobre el patrullero Toyota Etios que pertenecía a la Unidad de Prevención de Policía Local (UPPL) de Bahía Blanca.
Ese móvil policial había sido secuestrado el 25 de agosto pasado luego que el fiscal federal Santiago Ulpiano Martínez recibiera un informe de Asuntos Internos de la policía provincial que aseguraba que el GPS de ese vehículo marcaba que habría circulado nueve días después de la desaparición de Facundo por el cangrejal donde fueron hallados sus restos.
El patrullero fue sometido a un peritaje en busca de rastros de Facundo y uno de los perros adiestrados llamado «Yatel», del perito querellante Marcos Herrera, encontró «una turmalina de Facundo» en el baúl.
«La turmalina es una piedra que Facundo llevaba de colgante», dijo a Télam Luciano Peretto, uno de los abogados que representa a Cristina Castro.
Fuentes judiciales aseguraron a Télam que el informe elaborado determinó que «el sistema de rastreo satelital no tenía fallas» y que los fiscales a cargo de la pesquisa (Ulpiano Martínez, Andrés Heim y Horacio Azzolín) «están analizando la información con los otros elementos recibido en la causa».
«Nos llegó el informe y determinó que el AVL no falló en ningún momento, ese vehículo estuvo a 800 metros (del lugar donde fue hallado el cadáver) y estuvo 35 minutos parado el 8 de mayo», aseguró Castro esta mañana en declaraciones a una radio bahiense.
La mujer agregó que «el AVL no ha tenido ninguna modificación, ninguna falla, así que todo lo que estaba diciendo el ministro Berni que fallaba el AVL, ahora nos confirman que no, que no tiene ninguna falla», dijo la mujer a Radio Altos de Bahía Blanca.
Castro agregó que el patrullero Etios «se salió del distrito, ingresó a Villarino y estuvo 35 minutos parado a metros de donde se encontró a Facu. Están llegando las pericias que se están haciendo en Buenos Aires y cada día complican más a la policía bonaerense, yo siempre lo dije que a mi hijo lo mató la policía bonaerense de Villarino».
La mujer indicó que en la sede de Gendarmería Nacional de Bahía Blanca se llevarán a cabo nuevas pericias tanto al Etios secuestrado de la Policía Local como a una camioneta de la policía bonaerense decomisada en Mayor Buratovich que no posee AVL ni equipo de comunicaciones.
«Ese móvil de Buratovich es el mal llamado ‘perro’, cada una de las delegaciones tiene uno que no tiene AVL ni radio Motorola, llegamos a eso gracias a los vecinos y las personas que se acercaron», dijo.
También la mujer hizo referencia a la mochila hallada el pasado sábado por un pescador en la zona costera de General Daniel Cerri y en la cual ayer reconoció varios elementos que estaban en su interior durante una diligencia llevada a cabo en Gendarmería.
«En la mochila estaba el pantalón donde Facundo sale en la foto el día en que lo paran en Mayor Buratovich», dijo Castro al señalar además que estaba «el cepillo de dientes, la espuma de afeitar» pero que faltan «muchas cosas» de la mochila.
También Cristina Castro señaló que estaban los teléfonos celulares «que son de Facu, el Nokia que no tenía un mes de uso y el Blackberry que utilizaba antes él porque mi papá le había prestado uno».
«Estaban los dos teléfonos, el carnet de conducir, remeras que las conozco de memoria, pero faltan cosas de Facu que alguien tiene», afirmó, al indicar que «no apareció el buzo de Boca».
La mujer reiteró: «Lo he dicho desde un principio, ellos tienen las cosas de Facu, lo vengo repitiendo hace rato, desde el día que apareció el cuerpo desnudo que era un esqueleto, ahora veo el pantalón adentro de la mochila. Alguien tiene el buzo de Facu».
«Me llamó muchísimo la atención que la mochila estaba intacta y cerrada, al querer abrirla ese pescador se rompieron los cierres, no me explico cómo pudo estar la ropa de la forma que está y algunas prendas que están intactas como la gorra», dijo.
Facundo (22) fue visto con vida por última vez el 30 de abril último, cuando en plena cuarentena por la Covid-19 dejó su casa de Pedro Luro para ir a Bahía Blanca a ver a su exnovia.
En el trayecto fue detenido en, al menos, un control policial por violar el aislamiento, aunque se lo dejó continuar y, según cree su madre, tras ello fue desaparecido por policías bonaerenses que finalmente habrían arrojado sus restos en el cangrejal de General Cerri, en el partido de Villarino, donde fueron hallados 107 días después de su desaparición.