Los empleados del lugar se oponen a la medida de cierre. Primero increparon a autoridades de Nación y luego se enfrentaron con ambientalistas
El gobierno nacional clausuró oficialmente este lunes el Zoológico de Luján. Además, pidió a la Justicia que investigue denuncias e irregularidades que consideran se realizan en el establecimiento. En medio del operativo de cierre, los empleados del lugar desmintieron las denuncias realizadas e increparon a ambientalistas, y a funcionarios de Nación.
El operativo fue encabezado por el viceministro de Medio Ambiente de la Nación, Sergio Federovisky, quien aseguró que «las autoridades del zoo incurren en incumplimientos desafiantes» de las normas en cuanto al trato con los animales.
En medio de discusiones con los empleados del lugar que se oponían a la medida, el funcionario sostuvo que la idea es que el zoo se reconvierta en un ecoparque, al igual que otros establecimiento similares. Federovisky aseguró que en el establecimiento situado en el kilómetro 58 de la Autopista del Oeste no se cumple, entre otros requisitos, con «la información sobre los animales» que se encuentran en el lugar.
El zoo de Luján, conocido por posibilitar el contacto del público con animales, muchos de ellos considerados peligrosos, permanecía cerrado, en medio de las restricciones por la pandemia del coronavirus.
Incidentes
El procedimiento se cumplió en medio de incidentes protagonizados por empleados del lugar, que llegaron a apedrear la camioneta de un antiguo compañero, al cual le adjudicaron haber realizado falsas denuncias contra el funcionamiento del lugar.
El sujeto, que sería de apellido Vilches, fue golpeado y tuvo que retirarse a la carrera protegido por la policía dejando en el lugar su camioneta, cuyos vidrios terminaron destrozados a piedrazos.
Un hombre que se identificó como «hermano del propietario», aunque se negó a difundir su nombre, aseguró, ante varios periodistas, que Federovisky les pidió 200 mil dólares para no clausurar el parque.
Además, sostuvo que si bien durante varios años se permitió que la gente tomara contacto con los animales, esa actividad se prohibió hace tiempo y no se volvió a hacer.
«Como todo lo que funciona en la Argentina, empieza a prohibirse. Acá venían turistas de todo el mundo y después paseaban por Luján», sostuvo.