Tras cinco meses de cuarentena obligatoria por el coronavirus, el gobierno boliviano inicia una nueva etapa de flexibilización para reactivar la actividad económica
Bolivia concluye más de cinco meses de cuarentena por el coronavirus y comenzará una nueva fase denominada «posconfinamiento» que tendrá menos restricciones y tiene por objetivo recuperar la golpeada economía, informaron este lunes las autoridades.
La presidenta de facto, Jeanine Áñez, aprobó un decreto que amplía a partir de mañana las horas que se puede salir de las casas y circular con vehículos, reabre el espacio aéreo a vuelos internacionales y flexibiliza las restricciones en fronteras terrestres, entre otras medidas.
A partir de mañana se podrá salir hasta las ocho de la noche hora local de lunes a viernes, no solo hasta las cinco de la tarde como hasta ahora, y los fines de semana hasta las cuatro, un cambio sustantivo de la cuarentena que comenzó el pasado 22 de marzo.
La cuarentena, sin embargo, ya había empezado a flexibilizarse, con algunas idas y vueltas, en junio pasado.
Los vuelos internacionales, que se limitaban a unos pocos para repatriación de ciudadanos y residentes, pueden retomar sus operaciones regulares para cualquier viajero.
El único requisito es que los viajeros presenten un resultado negativo reciente de un test de coronavirus al entrar al país. Ya no se tendrá que hacer cuarentena obligatoria.
Las medidas se toman cuando el país reporta 4.966 fallecidos y 115.968 casos confirmados desde que aparecieron los primeros a principios de marzo, según datos del Ministerio de Salud.
El último reporte, correspondiente a ayer, muestra 28 fallecidos y 614 casos positivos diarios, cifras que están en los mismos niveles que los alcanzados en junio y lejos del pico de 2.036 confirmados y 96 fallecidos registrados en algunos días de agosto.
Los casos sospechosos experimentaron un notable descenso en los últimos días, desde los 13.599 del pasado miércoles a los 2.529 de ayer. Además, las cifras oficiales sostienen que los enfermos recuperados son 58.497, cerca de la mitad de los positivos confirmados.
Sin embargo, distintos estudios sitúan a Bolivia entre los países más afectados por la pandemia, con cerca del 1% de tasa de infección entre su población, de unos once millones y medio de habitantes, pese al declive de los casos activos y el incremento enfermos recuperados en los últimos días, informó la agencia de noticias EFE.
De acuerdo al balance de la Universidad Johns Hopkins, por cada 100.000 habitantes son 43,74 los decesos, lo que coloca al país entre los diez con mayor incidencia en el mundo.
El paso de la cuarentena al «posconfinamiento» mantiene, no obstante, prohibiciones de actos sociales y la suspensión de clases escolares, entre otras actividades.
El objetivo de esta nueva etapa es mantener la lucha contra la Covid-19 a la vez que recuperar la economía, según explicó Áñez.
La economía boliviana experimentó una caída de casi el 8% del PBI de enero a junio de este año, respecto al mismo periodo del ejercicio anterior, según un indicador del Instituto Nacional de Estadística de Bolivia.
El desempleo alcanzó en julio el 11,8%, cuando al término de 2019 fue del 4,8%, con un aumento que el instituto estadístico atribuye a la cuarentena.