Entre 2004 y 20016 los bosques vírgenes perdieron cada año en el mundo una superficie de 900 mil kilómetros cuadrados, una superficie equivalente a Austria, y el ritmo de destrucción se acelera desde que comenzó el siglo, según resultados presentados esta semana.
A pesar de algunos esfuerzos para luchar contra la deforestación, casi 10% de los bosques primarios del planeta fueron parcelados, degradados o simplemente destruidos desde 2000, según un análisis de imágenes satélite presentado en una conferencia sobre «bosques intactos» en Oxford.
En promedio son más de 200 kilómetros cuadrados perdidos por día desde hace 17 años.
Al ritmo actual, los bosques primarios habrán desaparecido para 2030 en Paraguay, Laos y en Guinea ecuatorial, y para 2040 en República Centroafricana, Nicaragua, Birmania, Camboya y Angola.
Fuente: Noticias Argentinas